Daniel Gómez (ALN).- Joe Haslam, irlandés, llegó a España porque la manera de hacer negocios en América Latina le hizo cambiar de perspectiva. Ahora combina su labor como docente con la gestión de Hot Hotels. También escribirá un libro sobre scaleups -“startups que nacen para ser grandes”-, materia en la que es todo un experto. Afirma que España tendría más empleos si se crearan más scaleups.
Joe Haslam es irlandés, profesor del Instituto de Empresa (IE), fundador de Hot Hotels y un enamorado de las metáforas sobre fútbol. “En España los niños sueñan con jugar en la Champions. En Irlanda con llegar a Bolsa”, dijo en una entrevista para ALnavío. Haslam casi lo logra. Fue con Marrakech, una startup que recaudó más de 70 millones de euros (80 millones de dólares) en capital de riesgo, contó con 250 empleados y se instaló en Dublín, Londres, Singapur, México y Buenos Aires.
“No llegamos al Nasdaq [mercado de valores electrónicos de EEUU] porque el clima de regulación cambió”, afirmó. Vendió Marrakech en 2006, y desde entonces sigue pensando en qué pudo hacer mejor para cumplir el sueño irlandés. Lo hace desde España porque la manera de hacer negocios en América Latina le hizo cambiar de perspectiva.
– ¿Qué le llevó a Latinoamérica?
– Cuando uno mira datos ve que el 10% de la población en Argentina es de Irlanda. Que la calle principal de Santiago de Chile se llama O’Higgins. Una vez allí, me gustó la forma de hacer negocios. Los irlandeses somos mediterráneos en un mundo anglosajón. Antes de montar algo prefiero conocer a la persona, como hacen en América Latina. En Inglaterra o en Estados Unidos no ocurre así, les da igual quién eres. Por eso decidí venir a España. Aquí existe un cruce de culturas que me permite seguir ligado al mundo latinoamericano, y también estar cerca de mi familia, que sigue en Irlanda.
Haslam lleva 12 años y medio en España. Da clases en el IE sobre emprendimiento y predica con el ejemplo. “Para credibilidad tienes que saber montar algo”. Por eso fundó Hot Hotels en 2011. Se trata de una aplicación móvil que permite buscar hoteles en el último minuto. Una startup “pequeñita, pero rentable”, que ocupa un hueco desasistido por gigantes del sector como Booking y Expedia. Trabaja con hoteles de 55 países en 333 ciudades.
– Venden para toda Latinoamérica, pero no en Venezuela.
– No es decisión nuestra. Nuestros hoteles vienen de brokers y los brokers han dejado de trabajar con hoteles en Venezuela. Creo que es por el tema de controles de capital.
– ¿Por qué apostó por el turismo?
– Nosotros tenemos una empresa de viajes porque es un negocio poderoso en España. Los inversores quieren invertir en esta industria. Mueve mucho. Además, hay mucha información. En los hoteles españoles registran cada dato del cliente y esa información te la envían de inmediato.
– Usted está inmerso en otro proyecto, un libro que escribirá este verano.
– Con mi piel no puedo pasar tanto tiempo en la playa [se ríe]. Mis padres eran profesores y tenían la casa llena de libros. Además, paso mucho tiempo diciendo lo mismo. Me sirve para seguir aprendiendo y para no repetirme. Así le digo a la gente: oye, mira, aquí tienes mi libro.
– En el libro hablará de scaleups. ¿Puede aclarar este concepto?
– Una scaleup es una empresa que nació para ser grande. Es importante que existan por una cuestión de empleo. En España hay un problema bastante grande con esto. Los grandes del Ibex quieren reducir sus plantillas. Las scaleups no.
– En España no vamos tan avanzados. Aquí de momento se habla de startups.
– Me hace gracia. Se habla del boom de las startups. Pero no es así. Leí hace poco que en España hay 5.000. Es un número bajo. Además, pienso que hay pocas posibilidades de que estas lleguen a algo, por lo que están quitando recursos. La idea es montar algo para ser grande desde el primer día. No montar algo para ver qué pasa. Yo quiero ver a esas startups cotizando en Bolsa. De ahí que haya que introducir la idea de que para lograr algo grande hay que ser una pre-scaleup y no una startup. Llevará tiempo, pero llegará.
– Para escalar, usted propone la internacionalización.
– Cuando sales al exterior es para no depender tanto del mercado nacional. En España hay siete años buenos por siete malos. Pongo de ejemplo la selección. Ganó la Copa del Mundo cuando había más jugadores en Inglaterra y Alemania. Para el emprendedor es positivo hacer negocios fuera, en más idiomas, con otras culturas. Tienes una empresa mejor en España si tienes experiencias fuera de España.
“Se habla del boom de las startups. Pero no es así. Leí hace poco que en España hay 5.000. Es un número bajo”
El IE, en colaboración con Haslam, elaboró un informe sobre internacionalización de startups españolas de base tecnológica. En él se habla de América Latina como un mercado de preferencia para estas compañías. De hecho, los países favoritos para desarrollar el negocio en 2017 y 2018, según el estudio, son México y Colombia. La experiencia latinoamericana fue útil para el profesor porque encontró su nicho. Y asegura que también lo será para los empresarios españoles.
– Hay gente que está muy cómoda en España. Es cierto, ahora Europa va bien. Pero no siempre es así, y eso en América Latina lo saben. Conozco empresarios latinoamericanos que cuando pasa algo malo lo aceptan y siguen hacia delante. Aquí en España queremos que todo esté perfecto todo el tiempo. Es una actitud que hay que cambiar.