Redacción (ALN).- El Gobierno de Panamá pretende reactivar la competitividad de los productores locales, mermados por la rebaja aplicada en 2012. Las tasas subirán del 15% al 30%.
Marcha atrás a la rebaja que el Gobierno de Martín Torrijos aplicó en 2012 a algunos productos lácteos en Panamá. La administración actual aumentó del 15% al 30% los aranceles de importación con el fin de “corregir” la distorsión originada hace cinco años, tal como apuntó un comunicado oficial. La anterior reforma atacó a los productores locales de queso mozzarella, quienes dejaron de ser competitivos. La medida mejorará sus condiciones, pero afectará a otros artículos como la leche condensada o evaporada, explicó a la agencia EFE una fuente del Ministerio de Desarrollo Agropecuario. En el comunicado, el Gobierno reseña que “con estas medidas se podrán poner en vigencia planes de promoción para el sector con el Banco Nacional de Panamá y el Banco de Desarrollo Agropecuario”.