(EFE).- Los países suramericanos instaron este jueves a Venezuela y Guyana a evitar «acciones unilaterales», en medio de la creciente tensión entre ambos países por el dominio de la región del Esequibo, que Caracas pretende anexionarse.
Así lo recogieron en una declaración divulgada al final de la cumbre semestral del Mercosur (Argentina, Bolivia, Brasil, Uruguay y Paraguay), celebrada en Río de Janeiro, que también fue suscrita por Chile, Colombia, Ecuador y Perú.
Los firmantes expresaron en la nota «su profunda preocupación con el aumento de las tensiones» entre Venezuela y Guyana.
La cruzada de Venezuela
El Gobierno de Nicolás Maduro ha emprendido una cruzada para incorporar al mapa venezolano la región selvática del Esequibo, un área de 160.000 kilómetros cuadrados controlada por Guyana, rica en petróleo y minerales, y cuya posesión reclama Caracas desde hace más de un siglo.
En este contexto, los países suramericanos «alertaron sobre acciones unilaterales que deben ser evitadas, pues añaden tensión», e «instaron a ambas partes al diálogo y a la búsqueda de una solución pacífica de la controversia a fin de evitar iniciativas unilaterales que puedan agravarla».
Después de realizar un referéndum el domingo pasado, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha presentado un plan de acción sobre la zona, que incluye el otorgamiento de licencias para la explotación petrolera y despliegues militares en localidades cercanas al área en disputa.
América Latina debe ser territorio de paz
«América Latina debe ser territorio de paz y en el caso presente trabajar con las herramientas de su larga tradición de diálogo», sentenció la declaración, que fue propuesta por Brasil, que hasta este jueves ocupaba la presidencia rotativa del Mercosur.
Fuentes de la Cancillería brasileña indicaron que todos los países de la región están «agotando todas las vías diplomáticas» para «intentar apaciguar la situación» entre los dos países.
Previamente, en la plenaria de la cumbre presidencial del Mercado Común del Sur (Mercosur), el mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, remarcó que «no quieren guerras» en Suramérica, «ni necesitan conflictos» en la región, sino promover «la paz».
Sobre esa controversia, el gobernante saliente de Argentina, Alberto Fernández, dijo que «no está bien», recalcando que Latinoamérica se destaca por ser una región de paz, algo que no se debe permitir que «se pierda», según su discurso, divulgado por la Presidencia.