Redacción (ALN).- La medida del Ejecutivo nicaragüense supuestamente busca compensar los efectos de la crisis que ha terminado con más de 119.000 empleos.
La economía de Nicaragua cayó 2,2% en cuatro meses. Desde que el 18 de abril comenzaron las protestas contra el gobierno de Daniel Ortega, 8.708 empresas cerraron, terminando con 119.567 empleos. Son datos reconocidos por el propio Ejecutivo. Como solución, el legislador sandinista Wálmaro Gutiérrez plantea una reforma fiscal que acabe con las exenciones de impuestos al sector privado. “No es creando nuevos impuestos, no es creando nuevos tributos. No. Es haciéndole pagar correctamente al que debe pagar tributos revisando nuestros esquemas de exenciones y exoneraciones que sólo ahí se van más de 3,5 puntos del PIB anualmente”, dijo Gutiérrez en la aprobación del presupuesto para 2019, según reseñó el diario nicaragüense La Prensa. “Solamente con una reforma fiscal bien hecha, podríamos nosotros revertir los efectos dañinos que nos ha dejado este fallido golpe de Estado”, agregó. Cabe destacar que ese ‘golpe de Estado’ del que habla son las protestas que los contrarios al Gobierno iniciaron hace cuatro meses. Protestas pacíficas que han dejado al menos 448 muertos, la mayoría causados por paramilitares y afines a Ortega, según denuncia la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos. Por otro lado, destaca La Prensa que el esquema de exenciones existe en el país desde hace 50 años. En los últimos años, apunta, el Fondo Monetario Internacional sugirió en diversas ocasiones al Gobierno eliminarlo. No obstante, Ortega mantuvo estos privilegios para que continuara su modelo de consenso con el sector privado.