Redacción (ALN).- Un sector de la oposición de Venezuela pidió este martes al poder electoral que inicie los mecanismos que conduzcan a la celebración de un referendo revocatorio contra el presidente socialista Nicolás Maduro, que gobierna el país sudamericano desde 2013. «La Comisión Promotora del Referendo Revocatorio presidencial ha consignado ante el poder electoral venezolano la solicitud de activacion del referendo revocatorio del presidente de la republica (…), con el único objetivo de que el pueblo venezolano pueda decidir libremente su destino», dijo a periodistas el dirigente opositor César Pérez Vivas.
El artículo 72 de la Constitución de Venezuela establece que «todos los cargos y magistraturas de elección popular son revocables» una vez se haya cumplido la mitad del período para el cual resultaron electos los funcionarios.
En este sentido, Pérez Vivas señaló que el lunes «se cumplieron tres años de la juramentacion del señor Nicolás Maduro» para el período 2018 – 2024, tras ganar unos comicios a los que no se presentaron los líderes tradicionales de la oposición y que buena parte de la comunidad internacional tachó de fraudulentos.
Para revocar a Maduro, los opositores necesitarán el apoyo de al menos 6.245.864 electores, esto es, al menos uno más de lo que respaldaron al llamado «presidente obrero» en los comicios de 2018, de acuerdo con el cómputo que hizo entonces el Consejo Nacional Electoral (CNE), el ente que organiza las elecciones en Venezuela.
El experto venezolano en temas electorales, Eugenio Martínez, ha dicho que los opositores enfrentan un «altísimo riesgo» político si intentan revocar a Maduro, en vista de las dificultades que reviste el proceso.
«Ir a un referendo sin modificar la normativa (dictada por el CNE en 2016) podría ser una locura», dijo Martínez esta semana en una entrevista con un medio local al explicar que el proceso necesita el cumplimiento de 9 fases de extrema complejidad logística.
Además, señaló que casi cuatro millones de simpatitantes de la oposición residen en el exterior, un fenómeno que, consideró, podría echar por tierra las aspiraciones del antichavismo.