(EFE).- El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió este viernes que «el mundo está en una trayectoria catastrófica hacia un calentamiento de 2,7 grados centígrados» con las actuales medidas para combatir el cambio climático, por lo que urgió a todos los países a presentar propuestas más ambiciosas en las próximas semanas.
Guterres reaccionó así a un informe de la agencia de Naciones Unidas para el cambio climático (UNCC), que ha analizado los planes nacionales de recorte de emisiones (NDC) aprobados o comprometidos hasta el momento de cara a la Cumbre del Clima (COP26) que se celebra este noviembre en Glasgow (Reino Unido).
«La ciencia nos dice que necesitamos un recorte de emisiones del 45 por ciento para 2030 con el fin de alcanzar la neutralidad del carbono a mitad de siglo. El informe de hoy prevé un aumento del 16 por ciento en las emisiones en 2030 en comparación con los niveles de 2010», lamentó.
Guterres insistió en que el mundo está en una situación de «código rojo», pero también en que no es demasiado tarde para actuar si se hace rápidamente.
«Antes de la COP26 todos los países deben presentar un NDC más ambicioso para poner al mundo en una trayectoria de 1,5 grados», señaló el jefe de Naciones Unidas en referencia al objetivo de aumento de temperatura fijado en el Acuerdo de París.
Además, Guterres exigió a los países ricos que cumplan por fin con la promesa hecha hace más de una década de facilitar 100.000 millones de dólares para apoyar a las naciones en desarrollo en la lucha contra el cambio climático.
«Los países del G20 representan el 80 por ciento de las emisiones globales. Su liderazgo es más necesario que nunca. Las decisiones que tomen ahora determinarán si la promesa hecha en París se cumple o se rompe», apuntó.
Dar un empujón a la lucha contra el cambio climático antes de la COP26 es uno de los objetivos centrales que Guterres se ha fijado para las reuniones que los líderes internacionales mantendrán la próxima semana en la Asamblea General de la ONU.
El lunes, el portugués presidirá junto al primer ministro británico, Boris Johnson, un encuentro privado con unos cuarenta jefes de Estado y de Gobierno para presionar en favor de medidas más ambiciosas.
Hoy, Guterres también participó en un foro de alto nivel organizado por la Casa Blanca, en el que EE.UU. y la Unión Europea propusieron una nueva meta global para reducir en un tercio las emisiones de metano en todo el mundo para 2030, donde insistió en la urgencia de actuar ya.