(EFE).- Las unidades de diálisis de los hospitales públicos de Venezuela presentan una inoperatividad del 18,5 %, un «descenso progresivo» del funcionamiento de estos espacios en relación con años anteriores, reveló el boletín de mayo de la Encuesta Nacional de Hospitales (ENH), publicado este miércoles.
«La operatividad de las unidades de diálisis hospitalarias ha venido en un descenso progresivo. Esto responde a varios factores, siendo las principales causas, la falta de agua constante y la falta de reparación de los equipos», detalló el estudio realizado pro la ONG Médicos por la Salud, en el que se monitorean 40 de los principales centros hospitalarios del país.
LEA TAMBIÉN
Visitas y charlas: La estrategia del chavismo para combatir las «mafias hospitalarias» (+video)
En los centros de salud monitoreados, la ENH determinó que en el 2019 la inoperatividad de estos centros que atienden a pacientes renales crónicos fue del 13,2 %, en 2020 aumentó a 15,6 %, en 2021 el registro fue de 14,4 % y en 2022 se incrementó a 18,5 %.
La ONG explicó que esta cifra «compromete seriamente» la salud de los pacientes renales agudos que no cuentan con terapia sustitutiva, por requerir diálisis con carácter de urgencia.
«Si bien en los hospitales se recibe a una cantidad importante de pacientes renales crónicos, la importancia de que este servicio funcione es que el paciente agudo grave no tiene posibilidad de movilizarse a ningún otro lugar para recibir el tratamiento», destacó el informe.
Además, la ENH se refirió a hechos violentos dentro de los centros hospitalarios y aseguró que «la violencia por parte de los familiares de los pacientes hacia el personal de salud ha sido la primera causa durante 4 años consecutivos».
«Grupos irregulares» en hospitales
En el texto se advierte, también, que dentro de los centros venezolanos pacientes y personal deben convivir con «grupos irregulares» que generan violencia dentro de estos espacios y que están allí para «controlar políticamente» estos centros de salud.
«Encontramos también que las fuerzas de seguridad, en cualquiera de sus órganos, han sido autores de hechos de violencia dentro de los hospitales, al igual que el gran número de robos comunes que se presentan en nuestros centros de salud», refiere el estudio.
La ENH concluyó que «los hospitales en Venezuela no son espacios seguros, ni para los pacientes ni para el personal que allí labora».
En su boletín del mes de abril, reveló que en Venezuela hay un promedio de dos quirófanos operativos por hospital, la mitad de los que se encontraban activos en 2019.