(EFE).- La Organización Mundial de la Salud (OMS) reiteró hoy su oposición a los «pasaportes COVID», que en la práctica limitan la posibilidad de viajar a los no vacunados, y añadió que esta medida no debería ponerse en práctica si las vacunas no están aún disponibles para una gran parte de la población global. «Imponer este requisito supone una doble desigualdad, ya que individuos de países sin acceso a las vacunas encima tendrían dificultades para viajar», señaló en rueda de prensa el director de emergencias sanitarias de la OMS, el irlandés Mike Ryan.
El experto puso como ejemplo la vacuna contra la fiebre amarilla, que sí se exige para entrar en determinados países donde es endémica, «porque hay un acceso universal a las dosis, y a bajo precio».
«Si se ordenan restricciones al viaje de individuos, al menos debe intentarse que sea con cierta igualdad de condiciones de acceso a las vacunas», subrayó Ryan.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, añadió que la diferencia de acceso a las vacunas (principalmente entre países desarrollados y en desarrollo) «ha provocado que algunos lugares ya hayan podido abrir sus sociedades, mientras otros siguen afrontando graves crisis de COVID con fuerte aumento de casos».
«Todo el planeta está cansado de las medidas de prevención, pero mientas los ciudadanos de los países desarrollados ya llenan las calles y los restaurantes, en el resto del mundo siguen los confinamientos», lamentó Tedros. EFE