(EFE).- La Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió hoy mantener la emergencia internacional por la pandemia de covid-19, en vigor desde hace casi dos años y medio, y alertó de los peligros que entraña la actual relajación en el seguimiento de los contagios que se advierte en muchos países.
«Hay una enorme desconexión entre la percepción que se tiene de la covid entre comunidades científicas, líderes políticos y opinión pública», lamentó en rueda de prensa el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, tras confirmar que el organismo mantiene el máximo nivel de emergencia por la pandemia.
Tedros optó por ello después de recibir las recomendaciones del Comité de Emergencia para la covid, que se reúne cada tres meses para analizar la situación de la pandemia y lo hizo por duodécima vez el pasado 8 de abril.
Tras tres horas y media de deliberaciones, los expertos del comité, presidido desde enero de 2020 por el epidemiólogo francés Didier Houssin, concluyeron que la covid «sigue constituyendo un evento extraordinario que aún impacta de forma adversa en la salud global».
El descenso en los tests del COVID-19
El comité advirtió por otro lado de que el descenso en los tests en muchos países, en un momento de proliferación de casos leves en aquellos con altas tasas de vacunación, está afectando a la capacidad de los expertos para analizar la evolución del coronavirus.
Lamentaron en este sentido «la reducción en la cobertura y en la calidad de la vigilancia», que se traduce entre otras cosas en un menor envío de secuenciaciones genómicas de casos de covid en todas las regiones.
«El virus está circulando libremente y los países no están gestionando eficazmente el riesgo de acuerdo con sus capacidades», aseguró en este sentido el director general de la OMS, quien advirtió del impacto que en muchas regiones está teniendo el «covid largo», o el mantenimiento de síntomas en pacientes ya recuperados.
Incluso con un menor control de la pandemia, en las dos últimas semanas se ha reportado un aumento del 30 % en los casos de covid a nivel global, a causa principalmente de los sublinajes BA.4 y BA.5 de la variante ómicron, advirtió el Comité de Emergencia.
«Nuevas olas del virus muestran una vez más que la covid está lejos de su final», resumió Tedros, mientras los expertos del comité aseguraron que la dinámica de la covid continúa siendo «impredecible».
A la luz de la situación el comité sugirió medidas para recuperar niveles de vigilancia anteriores, que podrían incluir una mejor integración en los datos nacionales de los resultados de las pruebas de autotest que muchos ciudadanos se practican actualmente, en sustitución de las pruebas PCR o los tests de antígenos.
La vacunación
Los expertos mantuvieron la recomendación de vacunar al menos al 70 % de las poblaciones nacionales para reducir los casos graves y los fallecimientos; y aconsejaron ayudar a los países que no han alcanzado aún tasas del 20 % con el fin de que puedan desarrollar estrategias para ampliar las inoculaciones en sus territorios.
Al mismo tiempo recomendaron que sigan las medidas para reducir la expansión del virus en eventos multitudinarios. Y otras individuales tales como el uso de mascarillas, el distanciamiento físico o la higiene frecuente de manos; aplicadas desde el inicio de la crisis sanitaria hace ya dos años y medio.
En palabras de Tedros, los gobiernos «deben revisar con regularidad sus planes de respuesta a la covid; basándose en los niveles epidemiológicos del momento y en el potencial de aparición de nuevas variantes».
El máximo responsable de la OMS exhortó por último a los países del G-20 a aumentar sus contribuciones a los programas para redistribuir vacunas; tratamientos y otras herramientas anticovid.