Daniel Gómez (ALN).- Rusia tiene cada vez más presencia en Latinoamérica, según el vicecanciller, Sergei Ryabkov. “Vemos una intensificación de los contactos a nivel político, una profundización seria de nuestro diálogo sobre la agenda internacional”. Un diálogo “despolitizado”. No como el que está ofreciendo Estados Unidos, agrega.
“Las relaciones entre Rusia y los países de América Latina y el Caribe, la parte más importante de la comunidad iberoamericana, están creciendo”. Lo afirmó este martes el vicecanciller ruso, Sergei Ryabkov, en una conferencia en San Petersburgo. Allí habló de “alianzas globales con Latinoamérica” en temas como:
– Seguridad.
– Armamento.
– Cambio climático.
– Narcotráfico.
– Ciencia.
– Crimen organizado transnacional.
Ryabkov también dijo que “uno de los centros de un orden mundial multipolar se desarrollará gradualmente en la región latinoamericana”.
La configuración de un orden multipolar mundial -en el que las instituciones no estén en cierta forma dominadas por Estados Unidos y Europa– es una de las prioridades del presidente, Vladímir Putin. Lo explica la investigadora del Real Instituto Elcano, Mira Milosevich, en su informe Rusia en América Latina.
En el caso concreto de Latinoamérica, Milosevich precisa que “Moscú ha utilizado sus conexiones en la región para enviar a EEUU y al resto del mundo el mensaje de que está dispuesta a desafiar a Washington”. El ejemplo se puede ver en Venezuela con el apoyo incondicional que muestra a Nicolás Maduro.
En su ponencia, el vicecanciller dijo estar preocupado por América Latina. “Estamos presenciando intentos continuos de ciertos círculos, incluidos los no regionales, para presionar a algunos países con el fin de lograr un cambio violento del poder legal allí. Rusia ve esto como la manifestación de una tendencia más amplia a socavar el derecho internacional y el abandono de sus principios fundamentales, como la inadmisibilidad del uso de la fuerza, de la amenaza, y la no injerencia en los asuntos internos de los Estados y su estructura soberana”.
A Rusia no le basta con Venezuela, Cuba y Nicaragua para ser un potencia en América Latina
Ryabkov se refiere a Estados Unidos. “El principal problema que vemos es el deseo de ciertos círculos, especialmente en la parte norte de América, de imponer a la comunidad internacional sus mismas normas y reglas. Normas y reglas que cambian dependiendo de la situación actual. De las preferencias de esta o aquella administración estadounidense, de los aliados y de personas de ideas afines que ahora los están siguiendo”.
Por eso pide un diálogo “despolitizado” con los países de América Latina. Un diálogo que ya se está dando: “Vemos una intensificación de los contactos a nivel político, una profundización seria de nuestro diálogo sobre la agenda internacional”.
La investigadora Mira Milosevich dice que “hay evidencia de que Rusia quiere ejercer influencia en América Latina a bajo coste”. De ahí, apunta, la irrupción de medios de comunicación prorrusos en español como Spunitk y RT. Así, agrega la investigadora en su informe, Rusia “aparenta ser una gran potencia e irrita a EEUU”.
Otra noticia relevante en este sentido es el sistema de visa de viaje que implantó Rusia con todos los países de América Latina en mayo de 2019. Esa es la forma de Putin de fortalecerse en la región.