Daniel Gómez (ALN).- La facturación de Telefónica Argentina alcanzó 2.604 millones de euros en septiembre, es la evolución más pronunciada dentro del mercado latinoamericano, de donde viene la mitad de los ingresos del grupo. Brasil, Chile y Colombia también progresaron, pero no con tanto brío como Argentina. La nota negativa la pusieron México y Perú, así como Venezuela, un mercado históricamente importante que sigue de capa caída.
De los 38.846 millones de euros que facturó Telefónica, 18.528 millones procedieron de Latinoamérica, lo cual supone el 48% del negocio global de la compañía, mientras que el 52% restante proviene de los negocios en Europa, fundamentalmente de España.
En el tercer trimestre de 2017, América Latina estimuló los resultados de Telefónica. Argentina encendió la mecha del mercado con una espectacular mejora de 34%. Por su parte, Brasil, el gran mercado global después de España, mantiene su evolución positiva, como también hicieron Chile y Colombia.
La mejora en estos cuatro países compensó el menor rendimiento de Perú, México y otras filiales con menor peso en las cuentas como Venezuela, Centroamérica y Ecuador.
Telefónica ingresó en Argentina 810 millones de euros, un incremento de 30,6% interanual. Por su parte, el Ebitda (beneficio bruto de explotación), creció 37,8% y se situó en 241 millones de euros. Gracias a estos indicadores, la filial cerró el ejercicio facturando 2.604 millones de euros, 456 millones de euros más que en el tercer trimestre de 2016 y una mejora de 34% de forma orgánica.
Telefónica ingresó en Argentina 810 millones de euros, una mejora de 30,6% interanual
Dice el grupo en el comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) este jueves que: “Los resultados del tercer trimestre de Telefónica Argentina presentan un sólido crecimiento de ingresos y Ebitda, tanto por un crecimiento progresivo del ARPU (media de ingresos por usuario), apoyado en el fuerte incremento del consumo de datos y en la gradual actualización de tarifas, como por un incremento de accesos de valor. Todo ello, en un contexto de progresiva mejora macroeconómica”.
Por su parte, Telefónica Brasil se reafirma como la primera teleco del país al acelerar el despliegue de los datos móviles 4G. La filial ganó 809 millones de euros hasta septiembre y facturó 9.128 millones de euros, según el documento entregado a la Bolsa de Sao Paulo.
En Chile, Telefónica sigue reforzando el posicionamiento competitivo. Por ello se enfoca en la captación de clientes de valor y en una continua mejora de la oferta. Así, el grupo logró una ganancia neta positiva de accesos totales después de 10 trimestres y evolucionó en 1,1% la cifra de negocios.
En Colombia, la filial “continúa mostrando un sólido comportamiento operativo en un entorno de mayor racionalidad competitiva”. Así logró elevar la facturación hasta los 1.094 millones de euros hasta septiembre (+1,3% en orgánico).
Malas noticias desde Perú y México
Al margen de los continuos descensos en Venezuela, que antaño llegó a tener la importancia que hoy tiene Brasil, y también de otros mercados menores como Centroamérica y Ecuador, llegan malas noticias desde Perú y México. La filial peruana, a pesar de mejorar los indicadores a lo largo del año y crecer de forma estable, sigue sin alcanzar los niveles generados en 2016. En este ejercicio facturó 1.756 millones de euros, 108 millones de euros menos que en el mismo periodo del año anterior. Pese a la bajada, Perú sigue siendo el tercer mercado de Telefónica en América Latina.
La situación en México es parecida. El desempeño durante el año es positivo, pero no consigue alcanzar los niveles de 2016. Sobre la situación del mercado mexicano, dominado en su mayoría por el magnate Carlos Slim, Telefónica expresó que “el entorno competitivo es de mayor racionalidad”.
En ningún momento citó en el informe el dictamen del Tribunal Supremo, que en agosto suprimió la tarifa cero, medida con la que el Estado garantizaba la competencia en México.
Aquella sentencia se decantó a favor de Slim y despertó el enfado de Telefónica. “El cambio en las reglas de juego tendrá serias consecuencias en la sustentabilidad y composición del sector”, dijo en agosto la compañía.