Daniel Gómez (ALN).- Desplome, tras desplome, tras desplome. La actividad de Telefónica en Venezuela va cuesta abajo y sin freno. En 2018 facturó 18 millones de euros, 82% menos que en 2017. Eso, pese a los esfuerzos de una plantilla que, con todos los problemas, logra que la operación se comporte “espectacularmente bien”. Eso dijo a ALnavío el presidente de la compañía, José María Álvarez-Pallete.
Verano de 2018. José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica, le dice a ALnavío en exclusiva que en Venezuela “cuenta con un grupo de auténticos héroes”. Que “pese a la ausencia de terminales, pese a la calidad del servicio, pese a la devaluación de los activos, la operación se comporta espectacularmente bien”. Que en Venezuela son “los líderes del mercado”.
Es cierto. Movistar era y es el operador líder del mercado. Pero es igual de cierto que Venezuela va camino de desaparecer de las cuentas globales. En 2018 la facturación fue de 18 millones de dólares y todo el dinero provino de ingresos por servicios. Si se compara esta cifra con la de 2017 se advierte una caída de 82%. ¿Qué será lo próximo?
El porcentaje sería impactante de no ser porque es la tónica que han marcado las cuentas de los últimos cinco años. Desplome de 82% en 2018. De 76% en 2017. De 70% en 2016…
El último gran resultado de Telefónica en Venezuela data de 2012. Entonces facturó 3.338 millones de euros. Estos son números del informe de cuentas de la época. Auditado. Informe en que ya se advertía de los problemas para convertir el resultado a euros a causa de la hiperinflación, de 20%.
A los venezolanos el número, 20%, y el propio término hiperinflación les parecerá irrisorio. A 1.370.000% llegó el índice de inflación en 2018, según el Fondo Monetario Internacional. Eso sí que es hiperinflación.
Las cosas han cambiado mucho desde entonces. El chavismo sigue en el poder, pero con otro rostro. En 2012 el presidente era Hugo Chávez, quien murió en 2013, y le sucedió Nicolás Maduro. Este llevó el país a la ruina por una mezcla de incompetencia y mala suerte: los precios del petróleo ya no son lo que eran.
En Venezuela es imposible hacer negocios
No hay número que definan con exactitud el desastre en Venezuela. Por eso se usan adjetivos. Y acontecimientos. Como el que vive ahora el país. En estos momentos, Maduro está contra las cuerdas. A causa, entre otros muchos factores, de la debacle económica,
José María Álvarez-Pallete le dijo a ALnavío que en Venezuela “cuenta con un grupo de auténticos héroes”. Que “pese a la ausencia de terminales, pese a la calidad del servicio, pese a la devaluación de los activos, la operación se comporta espectacularmente bien”
En enero, por primera vez en 20 años, apareció una alternativa clara al chavismo. Se llama Juan Guaidó y hoy es presidente encargado del país de acuerdo con la Constitución. A Guaidó lo reconocen más de 60 países, y a Maduro más de 60 países lo declaran ilegítimo. Pero Maduro se aferra al poder. Y Guaidó presiona para quitárselo.
Esta pugna entre presidentes agudiza la crisis económica en Venezuela. Eso advirtieron los economistas de BBVA en un reciente informe. La consecuencia es que no sólo amenaza el crecimiento del país, sino de una América Latina debilitada por la caída del precio de las materias primas y la falta de financiación internacional.
Este cúmulo de amenazas es terrible para la actividad de las empresas. Véase en Telefónica. Véase en Mapfre. La aseguradora presentó resultados hace dos semanas y apenas facturó 3,5 millones de euros en Venezuela. Son números más propios de una startup que de una multinacional.
En Venezuela le cuesta ganar dinero hasta a una petrolera. Y eso que está definido como el país con mayores reservas de hidrocarburos del planeta. A Repsol, que lleva 20 años de operaciones en el mercado y espera seguir allí otros 20, según su presidente, Antonio Brufau, le pagan en buques cargados de petróleo porque ya no quedan dólares.
¿Y qué pasará cuando no quede petróleo? La consultora noruega Rystad dice que si se mantiene el “statu-quo” en Venezuela -con las sanciones y los problemas de financiamiento, o sea, si se mantiene el régimen- la producción será de 800.000 barriles de crudo diarios en 2019, y de 680.000 en 2020.
Héroes que usan el ingenio
El caso es que el panorama en Venezuela es desolador. No hay un horizonte despejado y eso es lo peor que le puede ocurrir a una empresa. Y es en estos momentos cuando aparecen los héroes de los que hablaba Álvarez-Pallete. En el caso de Telefónica, los casi 2.000 empleados que mantiene en el país.
Empleados que hacen todo tipo de piruetas para salir adelante. Como aceptar pagos en criptomonedas. Con unos niveles de inflación tan disparados, el dinero carece de valor. Por eso apuestan por las alternativas que les ofrece el dinero digital. En concreto la divisa dash.
Dash es la segunda criptomoneda más popular en Venezuela, sólo superada por el archiconocido bitcoin. Es tan famosa porque a diferencia de las otras, se puede usar como dinero en efectivo. A esto se suma que la cotización no es tan volátil y que además garantiza la privacidad de las transacciones.
Movistar y otros 2.500 comercios que en Venezuela admiten la criptomoneda dash
Por eso los venezolanos confían en dash. Y en concreto, los venezolanos que dirigen las tiendas de Movistar de Petare, en Caracas, y la del Centro comercial La Casona 1, en San Antonio de Los Altos, estado Miranda. Estos dos comercios aceptan el pago con la criptomoneda como método de supervivencia.
Aunque no ganen dinero, los héroes de Telefónica también ayudan. No hay que olvidar el reconocimiento que dieron en 2017 al grupo Voluntarios Movistar por sus labores de apoyo y cooperación a favor de la Sociedad Anticancerosa de Venezuela.