(EFE).- Las autoridades de Australia dijeron este domingo que planifican los trabajos para la retirada de decenas de miles de peces muertos esta semana en el río Darling, cerca de la localidad de Menindee, a unos 1.083 kilómetros al oeste de Sídney.
El Centro de Operaciones de Emergencia con sede en Menindee, supervisado por la Policía de Nueva Gales del Sur, trabajará con otras agencias para retirar y eliminar los peces y mantener los flujos de agua limpia hacia la ciudad y las áreas circundantes, recoge el canal público ABC.
«No hay necesidad de que la comunidad se preocupe, ya que la evaluación inicial ha determinado múltiples soluciones viables para mantener el suministro de agua al municipio y sus alrededores», apuntan en un comunicado las autoridades.
La muerte masiva, cifrada por algunos medios como de un millón de peces, fue atribuida «a los bajos niveles de oxígeno» en el agua unida a una fuerte ola de calor.
Las imágenes publicadas por los medios muestran un enorme manto de peces muertos -principalmente arenques- flotando en el río, a medida que las autoridades surcan las aguas en barcas.
La policía dijo este domingo que las agencias estatales «liberan cantidades específicas de agua de mayor calidad para aumentar los niveles de oxígeno» y evitar nuevas muertes.
La remota localidad de Menindee, de unos 500 pobladores, sufrió un evento similar en el verano austral de 2018-19 cuando millones de peces murieron durante una de las peores sequías en décadas que aquejó al este de Australia.
Aquella muerte masiva de peces fue achacada a presuntos problemas de gestión de las aguas del río Darling, donde la Autoridad de la Cuenca de los ríos Darling y Murray ordenó el desagüe de los lagos de Menindee en 2014 y 2017 para cubrir la demanda de agua de otros pobladores y agricultores de la región.