Oscar Medina (ALN).- Los vinos de México obtienen reconocimiento y prestigio en concursos internacionales. En el país se consumen cerca de 90 millones de litros. El sector, apoyado por entes oficiales, viene desarrollando una importante labor de promoción que se traduce en eventos como el México Selection by Concours Mondial de Bruxelles que se realizará a partir del 9 de agosto.
Hay optimismo en esta industria y no es infundado. El vino hecho en México pasa por un buen momento tanto en consumo interno como en reconocimiento internacional. En 2017 los mexicanos dieron cuenta de 89,5 millones de litros, lo que representó un crecimiento de 10% con respecto a 2016. Y durante la última edición del concurso Bacchus, celebrado en Madrid, los caldos de este país recibieron 12 medallas, entre ellas el Gran Bacchus de Oro –el máximo galardón- concedido al Gran Vino Tinto Château Camou, de Baja California.
La estadística del Consejo Mexicano Vitivinícola arroja un dato que sustenta los augurios positivos: 30% del total consumido en 2017 fueron vinos locales, principalmente de Baja California, Querétaro, Chihuahua, Guanajuato, Aguas Calientes, Zacatecas, San Luis Potosí, Puebla, Sonora y Nuevo León.
“Los vinos mexicanos se distinguen por expresiones aromáticas florales y frutales únicas, y matices dulces en paladar, de gran carácter y personalidad”
Y el potencial es importante: 32.000 hectáreas de viñedos que podrían producir 10 millones de cajas al año para un país en el que, de momento, se consumen 750 mililitros per cápita.
Hay más elementos que reafirman la auspiciosa percepción en torno a una actividad que en los últimos años ha apostado a elevar sus estándares. Por ejemplo: en la edición 2017 del Concours Mondial de Bruxelles 18 etiquetas mexicanas recibieron seis medallas de oro y 12 de plata, en un concurso en el que se evaluaron más de 9.000 vinos de 50 países, incluyendo a gigantes como España, Francia e Italia.
“Casa Grande Chardonnay 2016 y Casa Madero Chardonnay 2016, ambos de la vinícola Casa Madero; Casta Tinta Syrah 2014, de la bajacaliforniana Casta de Vinos; Duetto 2011 y Solera Blanco, de Bodegas de Santo Tomás, y Zigzag 2014, de Hilo Negro, recibieron medallas de oro”, apunta una nota de prensa de mexicoselection.com.
En mayo pasado la cosecha premiada aumentó: 32 botellas mexicanas fueron premiadas en la edición 2018 del concurso realizado esta vez en Beijing. Eso incluyó la Gran Medalla de Oro para el Hacienda de Encinilla 2015, hecho en Chihuahua.
“Los resultados reflejan el compromiso ineludible por producir vinos de alta calidad en diversas regiones de México, así como el surgimiento de vinícolas con un enfoque absoluto en el buen manejo de los viñedos y procesos de vinificación a lo largo y ancho de todo el territorio mexicano”, dijo entonces Baudouin Havaux, presidente del Concours Mondial de Bruxelles: “Los premios también permiten constatar el desarrollo en paralelo de pequeñas, medianas y grandes vinícolas de todo el país”.
La premiación va más allá de las medallas: incluye una promoción especial de estas marcas en China, Italia, Sudáfrica, Bélgica, Japón y Estados Unidos.
La cita de Querétaro
El esfuerzo también se hace en casa, donde se busca elevar el consumo. Los buenos resultados en el que se considera uno de los concursos más importantes del mundo impulsaron la creación del evento “México Selection by Concours Mondial de Bruxelles”, que se realizará del 9 al 11 de agosto.
Este es un concurso local que alcanza su segunda edición y que tendrá como sede a la ciudad de Querétaro. Se enfoca en el reconocimiento y difusión de vinos y destilados hechos en el país y es producido por la propia directiva del Concours Mondial de Bruxelles y el Consejo Mexicano Vitivinícola, junto a autoridades y organizaciones regionales vinculadas al sector.
El objetivo es claro: “Se propone destacar las características de los vinos mexicanos de calidad, en México y el mundo, promoviendo al mismo tiempo una sana competencia para elevar los niveles cualitativos, y atraer a líderes de opinión internacionales para que difundan, en sus respectivos medios y canales de comunicación, información relativa a los logros de la vitivinicultura mexicana”.
En el evento participarán 37 especialistas de Francia, España, Noruega, China, Suiza, Estados Unidos, Bélgica y México que premiarán a las mejores botellas mediante evaluaciones en catas a ciegas. De modo que no se trata de mexicanos celebrando lo suyo: la participación internacional demuestra la clara intención de cimentar el camino hacia el pleno reconocimiento global, al mismo tiempo que se incrementa el descorche en la vasta geografía nacional. México ya es más que tequila y los próximos años se recogerán los frutos de esta iniciativa.
Gabriel Padilla Maya, director del Consejo Mexicano Vitivinícola, explicó a la revista Forbes algunas razones por las cuales el consumidor debería elegir caldos de México. Hay que destacar tres de ellas:
-“En los últimos cinco años los vinos mexicanos han obtenido más de 1.500 medallas en competencias enológicas de mayor prestigio en el mundo como Bacchus en España, el International Wine Challenge en Inglaterra, Vinalies Internationales en Francia y el Concours Mondial de Bruxelles”.
-“La calidad de los vinos mexicanos es consistente y con cualidades organolépticas particulares gracias a los factores de clima y suelo en las regiones del país donde se cultiva la vid”.
-“Los vinos mexicanos se distinguen por expresiones aromáticas florales y frutales únicas, y matices dulces en paladar, de gran carácter y personalidad”.