Leticia Núñez (ALN).- El canciller mexicano, Luis Videgaray, muestra su “absoluto rechazo” a la violencia que sacude Venezuela. En la visita a Madrid por los 40 años del reencuentro entre México y España, recuerda que la convicción de toda América Latina es que “debe prevalecer la democracia representativa”. México ratifica que ha asumido el liderazgo de América Latina en la crisis de Venezuela. Si la semana pasada capitaneó al grupo de 14 países de la región que emitió un comunicado conjunto para mostrar su preocupación ante las últimas decisiones del régimen de Nicolás Maduro, este miércoles el secretario de Relaciones Exteriores mexicano, Luis Videgaray, aseguró que su país ni puede ser ni será indiferente.
“Con pleno respeto a la libre determinación del pueblo venezolano, México no será indiferente ante algo que pone en riesgo la forma de gobierno democrática en uno de los países fundamentales de nuestro continente”, advirtió el canciller mexicano en un desayuno informativo celebrado con motivo de su visita a Madrid por los 40 años del restablecimiento de las relaciones diplomáticas con España.
México no será indiferente ante algo que pone en riesgo la forma de gobierno democrática en Venezuela”
Tras manifestar “el entrañable cariño” de México hacia Venezuela y la preocupación por “el grave deterioro objetivo de las instituciones democráticas”, Videgaray lamentó que Maduro haya pospuesto las elecciones a gobernadores desde el año pasado y “se hayan vulnerado las capacidades del Poder Legislativo”, en referencia a la decisión del Tribunal Supremo de Justicia de cancelar las competencias de la Asamblea Nacional -controlada por la oposición- para autoatribuírselas. El Gobierno rectificó dos días después entre acusaciones de ‘autogolpe’.
Por ello, México decidió dar un paso al frente y liderar a la región ante la crisis venezolana. Lo ha hecho en el marco de la Organización de Estados Americanos (OEA). “Nuestro país asume la responsabilidad adquirida al ser parte de esta organización. La OEA existe porque compartimos valores y la convicción de que debe prevalecer la democracia en toda América Latina”, añadió, al tiempo que hizo un llamamiento para que se restablezcan las instituciones democráticas.
Una actitud que contrasta con la postura “tibia” que la diplomacia mexicana mantuvo en la última década. Ahora, México está volcado hacia Iberoamérica. “Antes que nada, es un país iberoamericano, ahí es donde está nuestro corazón e identidad y ahí es donde queremos estar”, concluyó Videgaray.
Marcha del 19 de abril
Preguntado por la decisión de Maduro de armar a sectores de la sociedad civil, Videgaray pidió a todas las partes involucradas que “den prioridad al desarrollo pacífico de las marchas”. En este sentido, recordó que este lunes 11 países latinoamericanos, entre los que se encuentran Argentina, Brasil, Colombia y el propio México, realizaron un pronunciamiento público en el que pedían al Gobierno que se garantice el derecho de manifestación pacífica, y a la oposición que use este derecho de forma responsable. Este miércoles, la oposición venezolana se prepara para marchar en Caracas en un clima de elevada tensión alentado por las demostraciones de fuerza del chavismo tras la ola de protestas de las últimas semanas.
México es un país iberoamericano, ahí es donde está nuestro corazón e identidad», dijo Videgaray
“Un fusil para cada miliciano, un fusil para cada miliciana”, proclamó Maduro al término de un acto militar convocado el lunes “en defensa de la moral y en repudio a los traidores de la patria”, según dijo. El mandatario ya avisó que el Gobierno responderá con una movilización alternativa. Algo que ha criticado Videgaray: “Mi absoluto rechazo a la violencia. Hoy es un día particularmente importante en Venezuela y creemos que tanto el Gobierno como la oposición tienen una responsabilidad de mantener la voluntad política alejada de la violencia”.
Por su parte, el ministro español de Asuntos Exteriores y Cooperación, Alfonso Dastis, presente en el acto con Videgaray, señaló que la activación del plan cívico-militar en Venezuela, conocido como ‘plan Zamora’, “no es una buena indicación”. “Se debe permitir el uso de los derechos de reunión, expresión y manifestación”, añadió, pidiendo que impere “la cordura y la normalidad” y que no se creen “situaciones de tensión”.