Antonio José Chinchetru (ALN).- Aunque estuviera prevista, la subida de tipos de interés aprobada en EEUU trae riesgos para varios países de América Latina. El más sensible a la medida es México, pero también puede tener consecuencias negativas para Argentina y Venezuela. Los altos volúmenes de deuda externa y la profunda relación comercial con Estados Unidos de las economías argentina y mexicana son las claves.
Siguiendo el guion ya preestablecido, la Reserva Federal de EEUU (FED) subió los tipos de interés este miércoles un cuarto de punto, lo que los deja en una banda entre 1,75% y 2%, y anunció dos incrementos más hasta final de año. Con esta medida, el organismo presidido por Jerome Powell gana terreno por si estalla una burbuja o una nueva crisis. Sin embargo, el movimiento deja perdedores en América Latina. Se trata de los principales socios comerciales con EEUU en la región, México y Argentina, y los más endeudados con el exterior, entre los que destaca de nuevo México, junto con Brasil y Venezuela.
Mario Durán: “El principal riesgo está en que algunos países que basan su crecimiento en la relación comercial con Estados Unidos, pierdan ese poder adquisitivo”
En un análisis para ALnavío, Mario Durán, jefe de equipo de Aspain 11 Asesores Financieros EAFI, explicó: “Actualmente la FED no está alterando su hoja de ruta y cumple con las citas fijadas para las subidas de tipos basando sus argumentos en una inflación sostenida cercana el objetivo fijado de 2%, y un sector laboral demostrando fortaleza. En este sentido, el reto de los países latinoamericanos es no quedarse rezagados en este ambiente de crecimiento”. Añadió: “Próximas subidas de tipos en EEUU pueden aumentar el gap entre la economía norteamericana y los países que la rodean en América, si las potencias latinoamericanas no incrementan su ritmo de crecimiento, subiendo tipos consecuentemente”.
El analista destacó “el riesgo presente en los cruces de divisas”. Añadió que “una fortaleza del dólar desmedida sobre las divisas latinoamericanas, afecta de forma elevada la balanza comercial de sus principales socios comerciales como México o Argentina, y sobre todo a aquellos con más deuda emitida comprada por inversores en dólares”. Según este análisis, “el principal riesgo está en que algunos países que basan su crecimiento en la relación comercial con Estados Unidos, pierdan ese poder adquisitivo debido a la debilidad de su divisa en comparación con el dólar”.
México, el país más sensible
En los últimos 10 años el intercambio comercial entre EEUU y México rozó 4,68 billones de dólares en total, con un saldo positivo para México de más de 609.000 millones de dólares, según los datos de la Oficina del Censo de EEUU. Entre 2008 y 2017, México exportó a Estados Unidos por algo más de 2,64 billones de dólares y las ventas en sentido contrario superaron 2,03 billones de dólares.
Pero la sensibilidad de la economía mexicana ante las subidas de tipos no viene dada sólo por la importancia de este comercio bilateral. También afecta el endeudamiento exterior. Según los datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) correspondientes a 2016, México debe al exterior 313.605 millones de dólares (la segunda mayor de la región). De ese monto, 180.986 millones de dólares son deuda pública, la más abultada de América Latina.
Argentina es otro país cuya economía depende en buena medida del comercio bilateral con EEUU
Argentina es otro país cuya economía depende en buena medida del comercio bilateral con EEUU. Según los datos de la Oficina del Censo de EEUU, el intercambio comercial de 2008 a 2017 fue de casi 134.000 millones de dólares, con un saldo positivo para Estados Unidos de 44.645,6 millones de dólares. Las exportaciones estadounidenses superaron 89.000 millones de dólares y las argentinas se situaron por encima de 44.600 millones de dólares. De enero a abril del presente año las ventas de EEUU a Argentina rozaron los 3.077 millones de dólares y en sentido contrario se acercaron a 1.600 millones de dólares.
El país austral también es sensible a la política de tipos de la FED por su alto endeudamiento exterior. Según la Cepal, en 2016 llegaba a 156.043 millones de dólares, de los que 95.304 millones correspondían a deuda pública. El endeudamiento del sector público tan sólo es superado por México, Venezuela y Brasil. La deuda argentina se va a disparar por el crédito stand-by (derecho de giro) recientemente concedido por el Fondo Monetario Internacional. Es el mayor concedido por esta institución en toda su historia y alcanza 50.000 millones de dólares. Este rescate fue aprobado precisamente como medida ante la crisis que provocó el desplome del peso argentino frente al dólar.
El lastre de la deuda venezolana
Venezuela es especialmente sensible por su alto nivel de endeudamiento en una situación de crisis económica extrema. Según los datos de la Cepal, la deuda total en 2016 era de 151.007 millones de dólares. 132.156 millones de dólares correspondían al sector público (incluyendo la petrolera PDVSA), lo cual sólo es superado por México. En la actualidad esa cifra es mucho mayor. Aunque el Banco Central de Venezuela no ofrece datos desde mediados de 2015, existen cálculos independientes. Según la estimación ofrecida por Prodavinci, en 2017 el endeudamiento del sector público venezolano alcanzó 184.500 millones de dólares.
Según los cálculos de Prodavinci, con datos de Bloomberg y Kapital Consultores, tan sólo a lo largo de 2018 Venezuela tiene que hacer frente a pagos de deuda en bonos de la República y de PDVSA por 8.019 millones de dólares. En 2019 la cantidad subirá a 8.987 millones de dólares y un año después hasta 10.578 millones de dólares. La deuda pública per cápita en el país es de 2.159,4 dólares. Es muy superior a la de los siguientes más endeudados por habitante: Chile (626,9 dólares) y Ecuador (559,8 dólares).
Otros países con un alto nivel de endeudamiento exterior son Brasil y Chile. El gigante suramericano de hecho es el que tiene una mayor deuda con el extranjero en toda la región: 321.297 millones de dólares en 2016, según la Cepal. De ese monto, 130.274 millones de dólares corresponden al sector púbico. La deuda exterior chilena ascendió en el citado ejercicio a 163.789 millones de dólares La mayor parte, 128.480 millones de dólares, correspondía a entidades privadas.