(EFE).- La Policía colombiana detuvo este martes a Gabriel Enrique González Cubillos, un hombre que es acusado de asesinar a su hijo de cinco años al asfixiarlo en una habitación de un hotel de Melgar, un municipio del departamento del Tolima que está ubicado a poco más de 100 kilómetros de Bogotá.
La institución detalló que tras conocerse este martes el caso, que ha causado conmoción en el país luego de que se conociera que el filicida mandó un video y fotografías a la madre, contándole cómo perpetró el crimen, en un acto de violencia machista.
A raíz de ello, se desarrolló un «operativo intenso y envolvente» para ubicar al hombre en el menor tiempo posible.
En esa línea, agregó la Policía en un comunicado, González Cubillos fue detenido a las 15.00 hora local (20.00 GMT) en la carretera que une a Melgar con Girardot, en el vecino departamento de Cundinamarca (centro).
En menos de 24 horas se logró este resultado para contribuir al esclarecimiento del lamentable homicidio del menor de 5 años en Melgar. Esta Policía actúa contra el delito, no vacila en enfrentar el crimen y en ubicar a quienes afecten a nuestros, niños, niñas y adolescentes. pic.twitter.com/tCBX7D2ehc
— Policía de Colombia (@PoliciaColombia) October 4, 2022
El padre del menor fue puesto a disposición de las autoridades judiciales competentes para que responda por el homicidio de su propio hijo, así como por el delito de cohecho porque intentó sobornar a los policías que lo detuvieron.
Así transcurrió el crimen del menor de cinco años
El lunes se había dado por desaparecido al menor de cinco años, llamado Gabriel Esteban, al que el padre recogió el domingo en casa de la madre en Bogotá, de quien estaba separado, con la disculpa de llevarlo a una celebración familiar y desde entonces no se supo más de él.
Según la información proporcionada por la madre a medios locales, el hombre dejó una tarjeta de memoria en donde especificaba lo que le haría al menor.
Posteriormente, en la madrugada del lunes, el padre envió un mensaje por WhatsApp a la mujer en el que especificaba lo que le había hecho al niño y le deseaba que fuera feliz con su nueva pareja sin el hijo que tuvieron juntos, sugiriendo que se trataba de una venganza tras la separación.
La Policía ubicó al hombre por medio de la geolocalización de su teléfono y por el logotipo del hotel que se apreciaba en una de las fotografías enviadas a la madre pero al llegar al establecimiento el señalado asesino ya no estaba, por lo que se emitió una orden de búsqueda en su contra.
El coronel Néstor Cepeda, comandante de la Policía en el Tolima, explicó que al momento de ser detenido, el padre del menor se tomó la captura «con total naturalidad».