Daniel Gómez (ALN).- Como Pedro Sánchez antes de las elecciones generales, Manuela Carmena es la favorita para alcanzar la Alcaldía de Madrid. Como el presidente, la alcaldesa busca “un gobierno progresista” y no pone cordones sanitarios a ningún partido. Y como Sánchez, Carmena es la rival a batir. Es el objetivo principal de los ataques de la oposición. Así se vio en el debate de este lunes. Un debate en el que la alcaldesa sí mostró una diferencia con el presidente: la actitud.
“Manuela Carmena es como Pedro Sánchez”. Lo dijo José Luis Martínez-Almeida, candidato del Partido Popular a la Alcaldía de Madrid, este lunes en el debate a seis que celebró el Grupo Prisa en el Colegio Oficial de Arquitectos de la capital.
El candidato del PP no anda desencaminado. Sánchez y Carmena se parecen. La alcaldesa, al igual que el presidente antes de las elecciones generales, es la favorita en los comicios municipales del 26 de mayo. Favorita, pero según las encuestas, no cuenta con la mayoría absoluta para gobernar. Como Sánchez, necesita apoyos. Apoyos que, se intuye, vendrán del bloque de la izquierda –PSOE y Madrid en pie, así se llama la plataforma de Podemos, partido del que se separó Carmena al crear Más Madrid-, aunque Carmena no dice no a un pacto con Ciudadanos. Se abstiene de cordones sanitarios, como Sánchez.
“Tenemos que entendernos todos”, declaró la alcaldesa. Aunque acerca de sus preferencias sobre futuros pactos explicó que “el gobierno del progreso es el PSOE y cualquier formación de la izquierda progresista”.
Carmena habla de progresismo. Como Sánchez. Y como Sánchez, se convirtió en el centro de las críticas en el debate. Descafeinadas por parte de los candidatos del PSOE y Madrid en pie, y duras por parte de PP, Ciudadanos y Vox.
Martínez-Almeida cargó contra Carmena porque Madrid no está limpio. “Tenemos una alcaldesa que no acepta la realidad. En 2015 dijo que la ciudad estaba limpia y cuatro años después esta sigue siendo una de las principales preocupaciones de los ciudadanos”.
Begoña Villacís, candidata de Ciudadanos, acusó a Carmena de populista cuando la alcaldesa le recriminó que ni su partido ni el PP le dejaron gobernar. “El populismo es así, impera su verdad, pero sólo su verdad. Te pido también que tú nos escuches a nosotros”.
“Tenemos que entendernos todos”, declaró la alcaldesa. Aunque acerca de sus preferencias sobre futuros pactos explicó que “el gobierno del progreso es el PSOE y cualquier formación de la izquierda progresista”
Javier Ortega Smith, de Vox, le criticó “la falta de seguridad jurídica de su gobierno”. También “su falta de transparencia”. Y cómo “cuando alguien ocupa una vivienda viene la alcaldesa a aplaudirle”.
Al igual que Sánchez, Carmena se convirtió en el flanco de los ataques, pero su actitud no fue como la del presidente, quien, especialmente en el debate de Atresmedia, llegó a subir el tono y a entrar en el cuerpo a cuerpo con sus adversarios. Esto último sí lo hizo, pero desde la tranquilidad.
Carmena le dijo al candidato de Vox que “su afirmación es mentira” y que partidos como el suyo lo que buscan “es dar una imagen de inseguridad que no es cierta”. También le recordó que el Ayuntamiento de Madrid “es el más transparente del mundo, según la ONU”. En junio de 2018 recibieron este galardón.
Respecto a la afirmación del PP sobre la limpieza, Carmena no hizo autocrítica pese a ser un dato cierto. La Encuesta de Calidad de Vida y Satisfacción con los Servicios Públicos que siempre realiza el Ayuntamiento de Madrid reveló que la principal crítica de los madrileños es la limpieza. 40% de los vecinos encuestados se muestra preocupado por este aspecto. No obstante, este indicador es 6% menor que hace cuatro años, cuando la Alcaldía era del PP.
Carmena sí recordó este último dato, el del 6%. Y también recordó, sin citarla, que el Gobierno del PP liderado por Ana Botella firmó unos contratos con las empresas que recogen la basura que “no son buenos”. Y no lo son porque “favorecen a determinados barrios frente a otros” y en este tiempo “lo único que ha podido hacer es modificarlos”.
La acusación de Villacís no tuvo una respuesta directa de Carmena más allá de su alocución inicial: “Tenemos que entendernos con todos”. Al final hubo un detalle, los únicos que se quedaron a charlar sobre el escenario, y a despedirse con dos besos, fueron Carmena, Villacís, Pepu Hernández, candidato del PSOE, y Carlos Sánchez Mato, de Madrid en Pie.