Daniel Gómez (ALN).- La primera caravana de ayuda humanitaria avanzaba por el puente de Ureña, pero no pudo pasar. Con gases lacrimógenos la Policía Nacional Bolivariana impidió el paso de los camiones.
Nicolás Maduro baila en Caracas. Celebra la revolución. Celebra el chavismo. ¿Sus logros? Ante la falta de comida, de dinero y de libertad. Ante el hambre, la pobreza y la desesperación, el pueblo se organizó y, alentados por el presidente encargado, Juan Guaidó, tratan de entrar ayuda humanitaria a Venezuela.
Maduro baila este sábado. ¿Al son de las detonaciones? Las detonaciones de gases lacrimógenos que están sucediéndose en el frontera. En el puente de Ureña, donde a una carvana de camiones con alimentos, medicinas y material médico venida de Cúcuta se le prohibió la entrada a Venezuela.
La Policía Nacional Bolivariana fue la que cargó con bombas lacrimógenas contra los camiones. Camiones que venían cargados de gente, la cual se apoyaba en las barandas del vehículo. Esta gente sufrió las cosecuencias. No sólo por el efecto de los gases, sino porque tuvo que saltar del camión en medio del puente, exponiéndose a caídas de altura. De ahí que se viera a gente sangrando con heridas abiertas. En la cabeza. En el pecho.
Los reporteros de VPI detectaron hasta seis heridos. Algunos con impactos de lo que parecen perdigones, pero eso no lo captaron las cámaras. Lo que sí captaron fue el baile de Maduro en lo que, dice, es una marcha en Caracas por «la paz».
