Daniel Gómez (ALN).- En Canarias a Venezuela la llaman la octava isla. Fueron muchos los canarios que cruzaron el Atlántico tras la Guerra Civil y ahora las nuevas generaciones están regresando por la crisis. Pero no son las islas el destino principal del éxodo. Es Madrid.
El éxodo venezolano arriba a ritmo de vértigo a España. Tanto que las autoridades son incapaces de medirlos de forma exacta.
La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, asegura que en toda la Comunidad de Madrid residen alrededor de 60.000 venezolanos, mientras que el último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) habla de 91.228 venezolanos viviendo en toda España. Esto está lejos de ser cierto. El propio presidente, Pedro Sánchez, dijo este miércoles que hay más de 350.000 venezolanos en el país.
Las mismas incoherencias que en Madrid se dan en Canarias. En la provincia de Santa Cruz de Tenerife residen unos 20.000 venezolanos según el censo, pero la realidad habla de más de 70.000, dijo al diario ALnavío Jose Antonio Carrero, director de Carrero Abogados, una firma especializada en extranjería.
La socia de Carrero en el despacho, Raquel Pestana, agregó que los datos del INE no están bien interpretados. “Hay un desbordamiento de venezolanos por cuestiones culturales, por lazos inquebrantables, muchos por la época del hambre. Los canarios lo sabemos. Ahora estamos viendo que muchos de los venezolanos que llegan ni siquiera se pueden empadronar. Muchos ni siquiera saben qué es un empadronamiento. Y una persona sin empadronamiento no existe, y, por tanto, no existe para el INE”.
En 2018, el coordinador de Voluntad Popular en Canarias, Máximo Díaz-Estébanez, aportó un dato revelador sobre el empuje del éxodo: siete venezolanos al día estaban llegando a las islas por la crisis, declaró al diario La Provincia.
Datos del Ministerio de Trabajo distribuidos en febrero de 2019 apuntaron que en Canarias 33% de los nuevos empleos conseguidos por extranjeros fueron a parar a venezolanos.
Pero el equipo de Carrero Abogados aporta un dato más fuerte: “Estimamos que cada domingo, cada semana, en Tenerife aterrizan entre 90 y 100 venezolanos dispuestos a quedarse en casa de algún familiar, de algún amigo”, dijo Raquel Pestana refiriéndose al vuelo semanal de Plus Ultra Caracas-Santa Cruz de Tenerife.
El avión de las lágrimas
El arribo del éxodo a Canarias tiene una explicación emocional. En las islas a Venezuela se conoce como la octava isla. Esto se debe a que muchos canarios fueron a parar allí tras la Guerra Civil.
Venezuela entonces era un país de oportunidades. Un país receptor. Muchos salieron de la miseria allá. Se convirtieron en comerciantes, empresarios, inversores, desarrollaron la industria, destacaron en la agroindustria… Hasta el fallecido expresidente Rómulo Betancourt tenía ascendencia canaria.
Ahora sucede justo lo contrario. La miseria se apoderó de Venezuela y son los venezolanos los que huyen: el éxodo ya supera los cinco millones de personas en todo el mundo.
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Este drama se siente en las caras de los venezolanos que cada domingo llegan al aeropuerto de Los Rodeos, dijo el abogado José Antonio Carrero. “El venezolano llega apocado y con miedo. Con una especie de estrés postraumático. Esta es una inmigración silenciosa. El venezolano aterriza en España con su pasaporte, y con el pasaporte desaparece”, apuntó.
Sin embargo, no todo son lágrimas de dolor. El vuelo de Plus Ultra ha sido partícipe de muchos rencuentros. De familias que llevaban años e incluso décadas sin verse. De ahí que al aeropuerto de Los Rodeos también lo definan estos abogados como el aeropuerto de las lágrimas, sobrenombre que recibe el aeropuerto de Maiquetía, la principal puerta de salida del éxodo venezolano.
¿Más de 100.000 venezolanos en Madrid?
Cabe recordar que al éxodo venezolano no sólo le mueven las raíces. Es ya un tema de supervivencia. Y de ahí la elección de Madrid. La capital es la región más próspera de España. En la que más empleo se genera. Este 2019 superó a Cataluña como el motor económico del país.
En Madrid los venezolanos, al igual que los canarios en Venezuela, han destacado como inversores y por su empuje en el trabajo. Han conquistado el negocio de la restauración con tabernas, cafeterías y restaurantes. La flota de repartidores de Glovo, Uber Eats y Deliveroo es en su mayoría venezolana. Esta comunidad también tiene un peso importante en el sector inmobiliario. Y en la banca. Juan Carlos Escotet se ha convertido en un prestigioso banquero al frente de Abanca.
Quizá la imagen que resuma todo lo anterior se dio hace tres semanas, cuando Juan Guaidó visitó Madrid y abarrotó la plaza de la Puerta del Sol.
Desde 2015 hasta ahora el número de venezolanos en Madrid se ha triplicado. Son ahora 60.000 pero las autoridades de la Comunidad esperan que en 2020 alcancen los 100.000, adelantando definitivamente a Canarias como la primera región de los venezolanos en España.