Antonio José Chinchetru (ALN).- El secretario general de la OEA, Luis Almagro, sostuvo en Madrid que “no hay mejor manera de defender los intereses empresariales y económicos que recuperar la democracia en Venezuela”. Hizo esta afirmación al recoger el premio de la Fundación FAES que le entregó el expresidente del Gobierno español José María Aznar.
El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, apeló en Madrid a los valores democráticos para que la comunidad internacional actúe frente al régimen de Nicolás Maduro. Por si esto no fuera suficiente, sostuvo que el retorno de Venezuela a la democracia también es positivo para los intereses económicos y de las empresas. Se expresó de esta manera al recoger el VII Premio FAES de la Libertad, otorgado por la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES) de José María Aznar (Ver más: José María Aznar reclama a Mariano Rajoy que ponga a Venezuela en el centro de su agenda internacional).
“Cuantas más voces condenen esta abominable dictadura, más cerca estaremos de ponerle fin y de recobrar las libertades para los venezolanos”, sostuvo Almagro. También dijo: “No hay mejor manera que pararse encima de los principios, de los valores fundamentales de democracia y derechos humanos. Pero, aun así, vamos a suponer que el interés económico o empresarial prevalezca por ahí. No hay mejor manera tampoco de defender intereses empresariales o económicos que recuperar la democracia en Venezuela”. Y añadió: “La democracia en Venezuela es un imperativo fundamental para la reconstrucción del país”.
“Desde que asumió la presidencia, Nicolás Maduro ha instalado un gobierno corrupto y criminal”
Almagro manifestó: “La dictadura no apareció en Venezuela de la noche a la mañana, se requirieron muchos años para que ese gobierno, electo democráticamente, desmantelara una por una sus instituciones democráticas aferrándose al poder. Desde que asumió la Presidencia, Nicolás Maduro ha instalado un gobierno corrupto y criminal, cuya única preocupación es consolidar el poder y apropiarse de la riqueza de su país”.
En este sentido, continuó su discurso: “Maduro ha reemplazado el Estado de derecho por el autoritarismo. Desvirtuando el significado de la solidaridad regional, la comunidad internacional se había apegado al concepto de no intervención para justificar el hacer la vista a un lado cuando ese régimen, hambriento de poder, aplasta el derecho de los ciudadanos”.
Criticó la falta de acción que durante mucho tiempo ha habido frente al régimen de Maduro: “Se ha pagado un precio muy alto por el silencio y la inacción. Se ha pagado un precio muy alto por las falsas expectativas de diálogo. Se ha pagado un precio muy alto por la conveniencia de algunos de llevar a términos de gobernabilidad un gobierno corrupto, criminal, dictatorial”. Así, continuó: “Ese vacilar para alzar la voz y responsabilizar al régimen de Maduro ha permitido que hoy en día Venezuela tenga la corrupción y el autoritarismo que no merece”.
El secretario general de la OEA hizo un llamamiento a la comunidad internacional: “Ningún país democrático debe ser cómplice, y tampoco deben serlo los dirigentes ni sus representantes. Los silencios, las excusas, las ausencias y la palabrería son las principales razones por las que el régimen venezolano está todavía en el poder”.
Uso fraudulento del diálogo por Maduro
Almagro criticó al régimen de Maduro por utilizar las negociaciones con la oposición para afianzar su poder. Dijo: “Uno tras otro han fracasado los esfuerzos de diálogo para encontrar una solución pacífica a esta situación. El régimen aprovecha cada oportunidad de diálogo como una cortina de humo para consolidar la dictadura. En 2014, Maduro afianzó su posición cortando las distintas ramas del Gobierno. En 2016, canceló el referéndum revocatorio. En 2017, se creó y consolidó la Asamblea Nacional Constituyente. El recién fallido diálogo en la República Dominicana permitió al régimen convocar unas ficticias elecciones presidenciales. No son legítimas. Esta no es una elección. Este es un sistema autoritario con mecanismos para perpetuarse en el poder, entre los cuales existe esta convocatoria”.
“La reacción ha sido lenta, pero la presión internacional está cobrando fuerza”
Insistió en pedir firmeza al mundo democrático: “La comunidad internacional debe valerse de todos los recursos disponibles para poner fin a esta opresión. La reacción ha sido lenta, pero la presión internacional está cobrando fuerza”.
En su opinión, “las sanciones son la mejor herramienta diplomática que podemos tener, y por eso hago un llamamiento a los Estados para que sigan imponiendo sanciones más duras y de mayor alcance contra este régimen” (Ver más: Luis Almagro pide endurecer las sanciones contra la “dictadura” de Nicolás Maduro).
“Las sanciones no perjudicarán al pueblo venezolano, sino a los bolsillos de aquellos que están sustrayendo lo poco que queda de los recursos del país”, sostuvo. Añadió: “Toda sanción debe hacerse extensiva a los miembros de las familias de los peores transgresores de los derechos humanos y los traficantes de drogas del régimen. Es necesario imponer sanciones económicas más severas para cortar el flujo del efectivo que se utiliza para financiar la continua represión a la que está sujeto el pueblo venezolano”. En su opinión: “No hay peor sanción para el pueblo venezolano que seis años más de represión y dictadura”.