Daniel Gómez (ALN).- Las relaciones diplomáticas entre La Habana y Pyongyang cumplen 59 años. De ahí el banquete que brindó la embajada de Corea del Norte en Cuba a los dirigentes del Partido Comunista, y la peculiar visita que le organizaron al embajador cubano en Pyongyang. Quizá allí descubrió el regalo que le hizo Nicolás Maduro a Kim Jong-un.
En la embajada de Corea del Norte en Cuba estuvieron de banquete. No se sabe el menú, pero sí los invitados. Y el motivo: el 59 aniversario de las relaciones entre La Habana y Pyongyang.
Dice la agencia norcoreana de noticias que, al convite, celebrado el pasado jueves, acudió el secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba y miembro del Comité Central de Partido Comunista, Ulises Guilarte. Le acompañaron otros funcionarios del partido, de la Cancillería y también, de las Fuerzas Armadas Revolucionarias. No precisaron quiénes. El anfitrión, por supuesto, fue el embajador norcoreano en La Habana, Pak Chang-yul.
Paralelamente, en Pyongyang, para celebrar el aniversario, al embajador cubano en Corea del Norte, Jesús de los Ángeles Aise Sotolongo, lo llevaron de visita. Estuvo en “País del pueblo”, una representación “gimnástica y artística” de las bondades del país. Y también en la Exposición Estatal Permanente de Regalos, pasando revista “a los presentes dedicados por el pueblo coreano, los compatriotas residentes en ultramar y los surcoreanos”.
Maduro decreta la devoción del chavismo por Corea del Norte
En este museo tienen un objetivo claro: convencer a los visitantes de que sus líderes son universalmente admirados, explica Byoung-lo Philo Kim en su libro Dos Coreas en desarrollo. Por ello, en sus estantes aparecen los regalos que han recibido los dictadores de los distintos magnates extranjeros.
Se sabe que Nicolás Maduro hizo un regalo a Kim Jong-un. Fue el pasado 22 de julio, cuando su hijo, Nicolasito Maduro Guerra, andaba de visita en Pyongyang con las juventudes del partido chavista, el PSUV.
“El máximo dirigente Kim Jong-un recibió el regalo dedicado por el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros”, se lee en la Agencia Telegráfica de Corea del Norte.
“El máximo dirigente Kim Jong-un recibió el regalo dedicado por el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros”, se lee en la Agencia Telegráfica de Corea del Norte.
Rodbexa Poleo, secretaria general de la Dirección Nacional de la Juventud del Partido Socialista Unido de Venezuela, fue quien entregó el regalo al dictador. No directamente, sino a través de Choe Hwi, vicepresidente del Comité Central del Partido del Trabajo de Corea.
¿Cuál fue el regalo? No se sabe. La agencia norcoreana no aportó fotos del momento. Las exposiciones del museo no están disponibles en internet. En los canales de comunicación del régimen de Maduro no hay detalles. Tampoco en las redes sociales de Rodbexa Poleo. Eso sí, en Instagram dedicó un bonito mensaje a los norcoreanos: “Rindiendo honores a los líderes eternos de la República Popular Democrática de Corea, Kim Il-Sung y Kim Jong-Il. Estrechar lazos de hermandad, pero sobre todo Buscar la solidaridad y corresponderla”.
Este es el tono de las relaciones entre Pyongyang y Caracas. Un tono que subió de rango desde que hace dos semanas se inaugurara en Corea del Norte la embajada del régimen venezolano.
Nada sorpresivo si se tiene en cuenta que, con Nicolás Maduro en el poder, en el chavismo se profesa amor eterno por la dictadura norcoreana. De ahí también el regalo que le entregó a Kim Jong-un.
Este acercamiento a Pyongyang no es una iniciativa unilateral de Maduro. Una fuente en Washington explica al diario ALnavío que Cuba también ha jugado su papel en todo este asunto. De hecho, la fuente señala que el encuentro en Corea del Norte entre el vicecanciller de Maduro, Rubén Darío Molina, y su par, Pak Myong Guk, fue organizado por La Habana. Para que así Maduro aprenda de los norcoreanos a hacer negocios en un contexto de bloqueos y embargos. En eso Pyongyang es todo un experto.