Redacción (ALN) .- El presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, señaló este domingo que en una elección como la esperada el 28 de julio «es absurdo pensar que la abstención no jugará un papel relevante»
A su juicio, esto considerando que se arranca «con una abstención inducida de casi cinco millones de personas que no pueden votar por vivir fuera del país»
«Pero es que a ellos hay que agregar la abstención estructural, que son los venezolanos que no votan en ningún escenario y luego están los que no van a poder votar por otras razones propias o ajenas a su voluntad. Es obvio que la magnitud de la abstención puede afectar el resultado y es un enemigo a vencer, con estrategias más allá del voluntariado y la fe», expresó.
Asimismo, indicó que otra variable clave para entender el resultado de una elección es la capacidad de movilización inducida de las fuerzas políticas.
«Obvio que es importante comparar las preferencias, pero ¿y no es relevante saber quién es más fuerte en mover su gente al centro de votación, en un país donde es difícil moverse? ¿Es que te parece que el uso de las estructuras, recursos económicos, tecnología y capacidad de estimular o presionar, no puede desbalancear las proyecciones basadas en preferencia?», comentó.
Luis Vicente León sostuvo que otras variables claves que afectan un resultado son: «los recursos disponibles, el control de medios, el control Institucional y finalmente los costos de permanencia y salida del actor en poder, que lo pueden llevar a defenderse como sea».
«Claro que un candidato preferido tiene una ventaja electoral y por supuesto que puede ganar. Ese es el riesgo más importante de quienes buscan retener el poder. Pero pensar que eso es suficiente para garantizar un triunfo es bastante superficial», dijo.
Además, León apuntó que en cualquier elección se puede ganar o perder, independientemente de los niveles de popularidad de los actores en pugna.
«Si tienen alguna duda, pueden preguntarle a la Sra Le Pen, que vino de ser favorita en Francia al tercer lugar en resultados. Pero es que pueden chequear experiencias cómo la de Ortega contra Chamorros en Nicaragua, Atanas Mockus en Colombia o a los anti Brexit en Inglaterra. No estoy diciendo que eso tiene que pasar. Lo que estoy diciendo es que es un absurdo vender la idea que no hay forma de perder una elección, porque eres el más popular. Ahora, si el objetivo de quien manda ese mensaje es crear un ambiente que induzca el desconocimiento de cualquier resultado que le sea adverso, independientemente de la forma en que este ocurra, entonces no se trata de un análisis sino de una estrategia, por cierto extremadamente peligrosa», sentenció.
Destacó que «si lo que realmente pasa es que las fuerzas se están preparando no para un proceso electoral sino para un conflicto, entonces la variable a analizar no es la popularidad sino la fuerza bruta. Y la verdad, no creo que valga la pena explicar quién tendría la ventaja en ese plano».
«En todo caso, falta muy poco para que veamos cuál será el escenario real. Yo estoy convencido cuál de ellos es el mejor (y coincide con el deseo de las mayoría), lo que no tengo idea es cuál de ellos realmente ocurrirá y debemos evitar que las sorpresas se conviertan en violencia, porque ese sería, por mucho, el peor de todos los escenarios para el país», manifestó.