Elizabeth Fuentes (ALN).- No habrá choferes ebrios ni contaminación extrema. La fabricación de coches que no necesitan chofer ha comenzado y más temprano que tarde estarán a la venta en los concesionarios de medio mundo. Cuatro nuevas empresas y dos grandes del tamaño de Ford y BMW ya han iniciado la carrera por conquistar el mercado lo antes posible.
Los choferes son una especie en extinción. Entre cinco y 10 años se espera que los coches autónomos comiencen a llevar y traer pasajeros sin necesidad de conductor, volante o GPS. Esta certeza ya ha creado modelos y diseños distintos en grandes empresas, que han comenzado a cotizar en la Bolsa con la seguridad de que recibirán millones en ganancias.
Los nombres a recordar son Waymo, Ideo, Tesla y Uber, cada uno de los cuales ha avanzado en la investigación e incluso pruebas a gran escala en vehículos autónomos. De hecho, la gigante del alquiler de autos, Avis Budget, anunció recientemente que trabajará con Waymo -subsidiaria de Alphabet, la casa matriz de Google– en el desarrollo de coches autónomos que se podrán alquilar en todas sus sedes.
Waymo ha avanzado tanto en la carrera por lanzar la producción, que sus autos ya están siendo probados en Arizona para obtener datos sobre la interacción humana con automóviles autodirigidos, como si hubiese mareo por el movimiento, así como la optimización de las rutas. La empresa dio a conocer el programa a principios de este año en Phoenix, Arizona, donde ya ha puesto a andar los Waymo de manera gratuita entre los residentes que se presten para el experimento, aunque los coches llevan un ingeniero a bordo en caso de que se necesite intervención humana. Waymo anunció que planifica fabricar 500 modelos este año.
La española Raquel Urtasun es la encargada en Uber de echar a andar autos sin chofer
La noticia de la alianza entre Avis Budget Group y Waymo hizo subir las acciones de Avis Budget Group más de un 10%, en los intercambios del Nasdaq en Nueva York. Brian Nowak, de Morgan Stanley, cree que Waymo podría valer 70.000 millones de dólares. Y si bien Google retiró su modelo Firefly del mercado porque circulaba a 40 kms por hora, Waymo/Google han seguido experimentando en tecnología de conducción autónoma con vehículos de fabricantes convencionales, con la aspiración de lanzar al mercado el primer coche verdaderamente autónomo.
En una entrevista realizada en marzo pasado por el diario El Confidencial, Ken Washington, ingeniero nuclear, jefe mundial de investigación e ingeniería avanzada de la empresa Ford y responsable de las inversiones de la compañía en el desarrollo de autos sin pilotos, aseguró que “entre cinco y 10 años será el tiempo que tardaremos en ver coches autónomos a la venta en un concesionario… El software nos va a reemplazar al volante y tomará decisiones, igual que los humanos… solo que mejor”. También es sabido que el gigante BMW está igualmente en la búsqueda de ese nicho.
Espionaje, dinero y una mujer que sabe mucho
Tan lucrativo es el universo de los autos por venir, que el ingeniero Anthony Levandowski, empleado de Waymo, se robó 14.000 documentos confidenciales de esa empresa para crear Otto, una compañía que también investiga sobre coches sin chofer y que fue adquirida por Uber en 680 millones de dólares, incluidos los secretos tecnológicos robados. El suceso degeneró en disputa legal y un juez estadounidense finalmente ordenó la devolución de los documentos y le prohibió al ingeniero Levandowski que continuara trabajando en la tecnología que Uber estaba desarrollando, pero sin embargo autorizó a Uber a seguir adelante con su vehículo autónomo.
¿Y cómo respondió Uber? Contrató a la española Raquel Urtasun, una de las principales investigadoras del mundo en el campo de la percepción de máquinas, como la cabeza de la nueva división de automóviles autodirigidos, quien se centró en el panorama general: poner vehículos autónomos en todos los caminos.
“Estoy enfocada en el desarrollo del software que permite a los automóviles autodirigidos ‘ver’, es decir, reconocer objetos para que puedan navegar por el mundo de manera suave y segura”, dijo Urtasun.
La española ayudará a Uber a continuar el desarrollo del software que permite a los automóviles de conducción automática percibir el mundo que los rodea y entenderlo todo, desde el color del semáforo hasta las señas que haga un policía de tráfico.
Para Urtasun, “el futuro es que podamos convertir cada viaje en un viaje compartido usando una combinación de paseo compartido (tanto en el sentido tradicional como a través de la auto-conducción) y transporte público, porque el intercambio será más barato y más conveniente. Y al adoptar modos de transporte compartidos podemos hacer que todas las ciudades estén menos contaminadas y congestionadas”.
Aunque compartir el coche autónomo con desconocidos es otra idea bastante avanzada por la empresa de diseño Ideos. “Un auto que te recoge donde lo solicitas y los gastos son compartidos. Es un vehículo que cuenta con compartimentos individuales, tiene el modo silencioso que aísla al pasajero para no escuchar los ruidos ni conversaciones de sus compañeros de viaje y hasta el maletero está dividido en compartimentos privados. Los fabricantes esperan que este proyecto se haga realidad para el 2027, así podríamos reducir los choques, la contaminación ambiental y los gastos en la compra de coches. Las posibilidades incluyen elegir entre viajar en solitario o compensar el costo de su coche recogiendo pasajeros o alquilarlo a otros”, dicen en su portal.
Los coches autónomos tendrán una visión del mundo superior a la de un humano
Obviamente, la empresa Tesla, pionera en los autos eléctricos, no podía faltar en esta iniciativa y se espera que sea la primera en lanzar un auto ciento por ciento autónomo. Ya anunciaron que todos sus nuevos autos estarán dotados de un hardware que les permitirá ser completamente autónomos aunque ya tienen a la venta un auto mitad piloto-mitad autónomo.
“Cada coche lleva instaladas ocho cámaras que ofrecen una visión de 360 grados alrededor del vehículo y vigilan un área de hasta 250 metros. Además, 12 sensores ultrasónicos el doble de potentes que antes son capaces de detectar objetos de todo tipo y tamaño, delante, detrás o a los lados. En tercer lugar, un radar delantero ofrece datos adicionales incluso con lluvia fuerte, niebla o polvo. Finalmente, toda la información es gestionada por un ordenador a bordo cuya capacidad de cálculo es 40 veces superior al que ahora emplean”, dijo Ken Musk, el CEO de la empresa, quien asegura que sus autos tendrán una visión del mundo a la que un humano jamás podría llegar.