Leticia Núñez (ALN).- El banco de desarrollo más importante de América Latina cuenta con más de 12.250 millones de dólares en aprobaciones anuales en la región. Ahora queda por ver si otorgará un préstamo al gobierno de Maduro que la oposición califica de ilegal por no contar con la autorización legislativa. Paraguay mejorará su red eléctrica gracias a un préstamo de 150 millones de dólares (aproximadamente 138 millones de euros) que le ha otorgado la Corporación Andina de Fomento (CAF). Es el último proyecto financiado por el banco de desarrollo más importante de América Latina y se suma a las 152 aprobaciones anuales que efectuó en la región. Aprobaciones que ascienden a 12.255 millones de dólares (11.356 millones de euros). Mientras, los préstamos e inversiones realizados rondan los 20.760 millones de dólares (unos 19.236 millones de euros).
El gobierno venezolano sufre un problema financiero muy grande, tiene un hueco de unos 10.000 millones de dólares”, asegura Guerra
En el caso de Venezuela, la CAF, conformada en la actualidad por 18 países de América Latina, el Caribe, Europa y 14 bancos privados, ha financiado cuatro proyectos en el periodo comprendido entre 2014 y 2016. Uno para renovar la infraestructura vial por 300 millones de dólares (278 millones de euros), otro para la expansión de los Valles del Tuy (una subregión del estado Miranda) por 100 millones de dólares (93 millones de euros), un tercero para la construcción de la planta eléctrica Termozulia II por 60 millones de dólares (56 millones de euros) y el último para mejorar la calidad del servicio eléctrico en el Lago de Maracaibo por 200 millones de dólares (185 millones de euros). Ahora está por ver si el banco latinoamericano también otorga un préstamo de 400 millones de dólares (370 millones de euros) que el gobierno de Nicolás Maduro estaría solicitando, según informó la agencia Reuters.
El Parlamento venezolano, de mayoría opositora, ya advirtió este lunes a la CAF que la entrega de este crédito sería ilegal porque no hay una autorización legislativa. Fue el diputado y presidente de la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional José Guerra, quien denunció que el Banco Central de Venezuela habría pedido un financiamiento “con urgencia” al organismo multilateral para así cubrir los próximos pagos de deuda externa. A Venezuela y a la petrolera estatal PDVSA les corresponde cancelar en abril más de 2.000 millones de dólares (1.853 millones de euros) precisamente por este concepto, uno de los compromisos financieros más duros del año.
Guerra asegura que “el gobierno quiere que la CAF le preste dinero para pagar la deuda que ya tiene con ella” / Twitter: @JoseAGuerra
“El gobierno sufre un problema financiero muy grande, tiene un hueco de unos 10.000 millones de dólares (9.266 millones de euros), y con la CAF se le vencen algo así como 500 millones en intereses este año y lo que quiere lograr es un refinanciamiento, es decir, que la CAF le preste para pagar la deuda que ya tiene con ella”, señala Guerra en declaraciones al diario ALnavío.
La caída del precio del petróleo -el barril OPEP bajó a 48,26 dólares (44 euros) esta semana– alimenta aún más las dudas sobre la capacidad de pago del país latinoamericano. De hecho, en la pasada semana los crudos marcadores perdieron todo el terreno andado desde finales de 2016, cuando el recorte de producción de las grandes naciones petroleras logró oxigenar las cotizaciones. Actualmente los precios están en los mismos niveles de diciembre de 2016, es decir, en la zona de alarma que llevó a los miembros de la OPEP y a otros productores, como Rusia, a reducir el bombeo en unos 1,8 millones de barriles por día en lo que va de 2017.
“Es ilegal”
El diputado asegura que tal solicitud carece de fundamento legal y que, si se llegara a conceder el crédito de 400 millones “con el objeto de mejorar su posición de liquidez en moneda extranjera, tendría que ser declarado nulo”.
“Esto es ilegal porque el préstamo se está pidiendo con el Banco Central para que luego éste le pague a la CAF a nombre del gobierno. Y eso no se puede hacer”, asegura Guerra. ¿El motivo? “El artículo 37, numeral 3 de la Ley del BCV, publicada en la Gaceta Oficial Extraordinaria Nº 6.211 del 30 de diciembre de 2015, prohíbe al Banco Central tener préstamos con otras instituciones que no sean bancos centrales o el Fondo Monetario Internacional. Ese es el problema de fondo que hay”, sentencia al respecto.
Directivos de @AgendaCAF no se debe otorgar préstamo al gobierno de Venezuela sin la aprobación de la AN. Artículo 312 Constitucional
— Jose Guerra (@JoseAGuerra) 8 de febrero de 2017
Hasta ahora, Venezuela ha recibido créditos de la CAF, una de las principales fuentes de financiación multilateral de la región, para sufragar principalmente proyectos de desarrollo como obras de transporte y otros servicios públicos. Sin embargo, a diferencia de lo ocurrido en años anteriores, el Ejecutivo venezolano no tramitó ante la Asamblea la aprobación del presupuesto y endeudamiento para 2017, después de que el máximo tribunal del país declarase que el Parlamento está en desacato. “Todo endeudamiento público requiere la aprobación de la Ley Especial de Endeudamiento y ésta no ha sido aprobada por la Asamblea Nacional”, zanja Guerra.
“Ayudar al que está en desgracia”
Asimismo, el diputado recordó que la CAF fue concebida como un banco de desarrollo, orientado a financiar proyectos de inversión, principalmente en el área de infraestructura, como ha venido haciendo desde 1970. La propia institución recoge en su página web que el abanico de proyectos que puede sufragar “es muy variado” y abarca planes relacionados con la vialidad, el transporte, las telecomunicaciones, la generación y transmisión de energía, el agua y el saneamiento ambiental, así como los que propician el desarrollo fronterizo y la integración física entre los países accionistas.
Si la CAF llegara a conceder el crédito de 400 millones a Venezuela, tendría que ser declarado nulo”, defiende Guerra
Todo ello siendo “respetuosos con las diferencias ideológicas”. En un acto celebrado en la Casa de América de Madrid, el presidente ejecutivo de la CAF, Enrique García, aseguró que trabajan con regímenes de diferente índole “siempre que tengan unos proyectos sanos y transparentes a nivel técnico, económico y de medio ambiente”.
Asimismo, destacó que el principio básico de la CAF es “ayudar al que está en desgracia”. “Somos el banquero que saca el paraguas cuando llueve, porque cuando hay sol no se necesita paraguas. No hay ni un solo país que haya pedido prestado a la CAF y la CAF no le haya prestado”, agregó.
“Que la CAF actué apegada a la ley”
Más allá de los proyectos, el banco de desarrollo establece que los créditos que otorga son “préstamos para comercio (pre-embarque y post-embarque) y capital de trabajo, préstamos para proyectos y de garantía limitada”. Algo que también recuerda el parlamentario venezolano en declaraciones al periódico El Universal: “La CAF no concede ayudas para balanza de pagos, que es lo que requiere el Banco Central de Venezuela ante la declinación de sus reservas”.
Por ello, Guerra no duda en alertar “a las autoridades de la CAF a que actúen apegados a la ley y que no sean objeto de presión política por parte del gobierno”. Tras manifestar que el Parlamento venezolano está en la mejor disposición a colaborar en la resolución de la crisis económica, reitera que todo endeudamiento público requiere la aprobación de la Asamblea Nacional.
Directivos de @AgendaCAF las leyes son para cumplirlas. Todo acto de una autoridad usurpada es nulo. Cumplan la ley pic.twitter.com/jcSqkct23l
— Jose Guerra (@JoseAGuerra) 8 de febrero de 2017