Daniel Gómez (ALN).- El gobierno de Donald Trump sigue endureciendo el cerco a La Habana. Este miércoles anunció la Lista de Alojamientos Prohibidos, que incluye 433 propiedades en las que participa el gobierno de Cuba. La medida afecta directamente a las ocho empresas españolas que operan en el país y sus más de 50 hoteles.
“Las ganancias que obtiene el gobierno cubano de establecimientos en la industria hotelera que son propiedad o están controlados por el gobierno cubano, altos funcionarios del régimen, líderes del Partido Comunista de Cuba y sus familias, benefician de manera desproporcionada al gobierno cubano. Y todo a expensas del pueblo cubano, que continúa enfrentando la represión a manos del régimen. En cambio, los viajeros autorizados deben alojarse en establecimientos privados o casas particulares, propiedad de empresarios legítimamente independientes y operados por ellos”.
“Lo dice el Departamento de Estado de Estados Unidos en un nuevo apretón de tuerca a La Habana. Y es que este miércoles la Oficina de Control de Activos anunció la Lista de Alojamientos Prohibidos en Cuba, que incluye 433 establecimientos que “son propiedad o están controlados por el régimen cubano o por ciertos conocedores bien conectados”.
Esta medida del gobierno de Donald Trump afecta directamente a las ocho empresas turísticas españolas que trabajan en Cuba. Al menos 59 hoteles están afectados.
Los 21 hoteles de Meliá Hotels International.
Los 18 establecimientos de Hoteles Iberostar.
Los 7 del Grupo Globalia.
Los 6 de la cadena Roc.
Los 3 de Hoteles Valentín.
Los 2 de NH.
El hotel Solymar de Barceló.
El H10 de La Habana.
En Cuba las empresas españolas no son propietarias de los hoteles, sino responsables de la gestión. El dueño de los establecimientos es realmente el Estado cubano a través de las empresas estatales. Se sabe que en Cuba la propiedad privada no existe como tal, y la única alternativa residencial no sancionada por los EEUU es alojarse en casas de particulares o negocios de cuentapropistas, empresarios que trabajan a espaldas del gobierno.
“Los viajeros autorizados deben alojarse en establecimientos privados o casas particulares propiedad de empresarios legítimamente independientes y operados por ellos”, precisó el Departamento de Estado.
Restricciones a la importación del tabaco, el alcohol y la cultura cubana
La acción del gobierno de EEUU también restringe “la importación de productos de tabaco y alcohol de origen cubano; asistir u organizar determinadas reuniones o conferencias profesionales en Cuba; y participar y organizar determinadas presentaciones públicas, clínicas, talleres, concursos y exposiciones en Cuba”.
Como agregó el Departamento de Estado, estas acciones “buscan privar al régimen cubano de los recursos que utiliza para oprimir al pueblo cubano y financiar su injerencia en Venezuela, en detrimento de los ciudadanos de ambos países”.