Redacción (ALN).- A una semana del primer aniversario de la ampliación, el administrador de la Autoridad del Canal, Jorge Quijano, señala que aspiran a aportar a Panamá 1.601 millones de dólares en 2017, un 60% más que el año anterior. La otra cara está en las demandas que encabeza Sacyr por la ampliación, que suman 5.685 millones.
La ampliación del Canal de Panamá, que cumplirá un año en servicio el próximo 26 de junio, arroja resultados “un poquito mejores” de los esperados, según el administrador de la Autoridad del Canal (ACP), Jorge Quijano. Las nuevas esclusas ya representan el 31,86% de los ingresos del Canal, que este año aspira a aportar a Panamá 1.601 millones de dólares (aproximadamente 1.432 millones de euros), un 60% más que en 2016.
Quijano señaló, tal como recoge la agencia EFE, que una parte del resultado “positivo” de la ampliación se explica por los buques que transportan gas natural licuado, que no pasaban por la vía antes del ensanche porque no cabían. Con la ampliación, desde el 26 de junio de 2016 hasta la actualidad, han transitado por el Canal casi 1.500 neopanamax (buques aptos para el tránsito por las nuevas esclusas), de acuerdo con las cifras expuestas por el administrador.
Una parte del resultado “positivo” de la ampliación se explica por los buques que transportan gas natural licuado, que antes no pasaban porque no cabían
Los tránsitos de gas licuado de petróleo “en las esclusas viejas se han mantenido casi al mismo nivel del año pasado”, aseguró Quijano. Resaltó el paso de esa carga y también del gas natural licuado por la ampliación y la expectativa de que siga creciendo gracias a las exportaciones de Estados Unidos.
Entre octubre de 2016, cuando empezó el año fiscal 2017, y el pasado mayo, los ingresos del Canal sumaron 1.788,5 millones de dólares (1.600 millones de euros), un 12,5% más que en el mismo período del ejercicio anterior. Desgranado, esto se traduce en 9.380 tránsitos, el 2,3% más, y de una carga que sumó 269.956.270 toneladas, un 22,2% más.
En ese periodo, Estados Unidos se mantuvo como el principal cliente de la vía interoceánica con el 68,7% de la carga, seguido de China con el 30,7% y Japón con el 11,6%, de acuerdo a las estadísticas de la ACP.
Las demandas de Sacyr esperan resolverse antes de 2022
Pero no todo son buenas noticias para la vía interoceánica. Las demandas del Grupo Unidos por el Canal (GUPC), liderado por la española Sacyr, que construyó las nuevas esclusas de la ampliación, suman 5.685 millones de dólares (5.088 millones de euros), según Quijano, aunque espera que el asunto esté resuelto “con justicia” entre 2021 y 2022.
Quijano reiteró que el GUPC es el único contratista con el que quedan reclamos pendientes, puesto que ya se cerraron los contratos con el resto de empresas que participaron en la docena de proyectos de la ampliación, algunos de los cuales también presentaron reclamaciones.
Aunque no quiso especular sobre los resultados del proceso con el GUPC, Quijano aseveró que la gran mayoría de las demandas que ha enfrentado la ACP en los múltiples proyectos que ha desarrollado las ha ganado, porque casi siempre los montos presentados por los contratistas “no se pueden sostener”.
Quijano recordó, además, que la ACP entregó al GUPC adelantos en la obra que ascienden a 860 millones de dólares (769 millones de euros), “que si al final no se utilizan se convierten en excedentes” que pertenecen a la vía interoceánica.
La ACP ya ha pagado por concepto de reclamos 373,6 millones de dólares (334 millones de euros).