Antonio José Chinchetru (ALN).- El idioma no siempre une tanto como parece. Directivos de varias firmas de infraestructuras españolas que trabajan en América Latina hablaron sobre ello en la Casa de América en Madrid. Expusieron que la comunicación es uno de los grandes problemas, junto con los errores a la hora de seleccionar socios adecuados para desarrollar la actividad en la región y el desconocimiento de los países.
Al margen de los gigantes de la ingeniería civil, numerosas pequeñas y medianas empresas españolas de infraestructuras están presentes en toda América Latina desarrollando diferentes proyectos. Algunas cruzaron el Atlántico buscando una tabla de salvación en la época más dura de la crisis económica en España. Otras lo hicieron movidas por una vocación previa. Pero todas tienen algo en común, que fue desvelado en el transcurso de una mesa redonda que tuvo lugar en el marco de la jornada Infraestructuras en América celebrada en la Casa de América en Madrid. Se trata de los problemas de comunicación, las dificultades para encontrar los socios adecuados y el desconocimiento de los países.
Ignacio Juan-Aracil: “Nos creemos que el idioma es el mismo, y la realidad es que no lo es”
El primer ponente de la mesa Las empresas españolas en el sector de las infraestructuras: casos de éxito en apuntar estos problemas fue el consejero delegado de PECSA, Ignacio Juan-Aracil. La firma está presente en Chile, donde ha construido colegios, centros sanitarios, complejos judiciales y promociones privadas de vivienda. Para Juan-Aracil, “el temazo es la comunicación”. Afirmó: “Nos creemos que el idioma es el mismo, y la realidad es que no lo es. Hay muchos temas culturales y de comunicación que hablamos distinto”.
Contó: “Yo he salido de múltiples reuniones pensando que nos había ido fenomenal y le preguntaba a mi socio chileno y me decía que fatal. No es un tema de que no se expresen bien, es que la forma de expresarse es distinta y la comunicación es diferente”.
El director general de negocio de Structuralia (una escuela de ingeniería presente en España, México, Colombia, Perú, Centroamérica y Chile), Juan Antonio Cuartero, se mostró en completo acuerdo con el problema del idioma.
Así, relató un caso que presentaron unos programas a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). “Los de la UNAM nos empezaron a decir ‘sí, pero es que aquí en México la cosa es diferente. Es que el programa que tú has hecho está muy bien pero no es un programa mexicano’. ¿Qué nos tocó? Pues contar con socios locales que nos ayudaran a tropicalizar no sólo la normativa, que era importante, sino también el lenguaje. Por ejemplo, al hormigón lo llaman concreto. El lenguaje nos dio algún disgusto”. Y agregó: “Muchas veces te encuentras con estos retos que tienes que superar”.
El director general corporativo del Grupo Ortiz (presente en Colombia, México, Perú y Panamá), Raúl Arce Alonso, también habló de ello: “Si la comunicación entre españoles expatriados es difícil, porque están muy lejos, con los socios locales es muy complicada. Recuerdo un caso con el hospital de México que tenemos en concesión. Tenemos dos socios locales, tenemos consejos vía videoconferencia y no somos capaces de entendernos, y hablamos el mismo idioma”. Ortiz considera que para subsanarlo es necesario viajar allí para hablar en persona.
La dificultad de dar con el socio adecuado
La búsqueda de socios adecuados es otro de los grandes retos. El consejero delegado de Peyco (con actividad en Colombia, Perú, Chile, Argentina, Paraguay, Bolivia, Costa Rica y Nicaragua), Ignacio Martínez, dijo al respecto: “Uno los intenta seleccionar, y a veces se tiene mucha suerte y a veces, desgraciadamente, no. También con eso hay que lidiar, con un socio difícil o con uno imposible del cual te tienes que separar” (Ver más: Esta empresa española triunfa en América Latina aunque siempre fracasa en el primer intento).
En este sentido, Raúl Arce afirmó: “Elegir un buen socio no es fácil. No conoces a nadie y eso te hace cometer errores”. En el caso de PECSA no se encontraron con ese problema, puesto que desde el primer momento contaban con un socio local que conocía al consejero delegado de la empresa desde antes y que es con el que se decidió empezar a trabajar en Chile.
Los directivos españoles de pymes de infraestructuras recomiendan no ir con prepotencia a América Latina
En todos los casos, los directivos recomiendan no ir con prepotencia a esos países. Juan-Aracil dijo: “Hay que ser humildes, no ir creyéndonos que lo sabemos todo. Muchas veces es verdad y hay cosas que podemos abordar, pero hay cosas que ellos saben mucho mejor que nosotros”. Para Arce: “Muchas veces buscamos optimizar recursos y pensamos que muchas cosas las podemos gestionar aquí, y hay que entender que ellos son locales y hay que ser sensibles a sus inquietudes”.
Finalmente, Martínez sostuvo: “En general, cuando estás fuera el frágil eres tú. Por varios motivos. Primero porque no estás; segundo porque no es tu entorno, no tienes agarraderas a las que asirte cuando tienes problemas. Entonces, un buen ingrediente es ‘el tonto soy yo, yo soy el que tiene que aprender todo’. Esto de ‘lo español es lo mejor porque aquí estáis menos desarrollados’ es un ingrediente que te puede llevar a tener un problema”.