Moris Beracha (ALN).- Dudas, emprendimientos, nuevas inversiones y prohibiciones marcan el creciente mercado de las criptomonedas, que resulta tentador e interesante y se abre su propio espacio ante la mirada reprobatoria del establishment, pues les resta poder a gobiernos y bancos.
Hace pocas semanas China prohibió las criptomonedas y Rusia va camino a dar la misma orden, lo que indica que los ya conocidos Bitcoin, Ethereum y Moneto -entre muchos otros- no podrán comercializarse en estos lugares del mundo. El intento busca frenar lo que se ha llamado la criptomoda o la revolución de las monedas virtuales.
Sin embargo, países como Japón, Corea del Sur y otros la están aceptando como una moneda oficial. Este cambio drástico de las maneras en que la economía del mundo viene haciendo las cosas desde hace siglos representa ciertamente un peligro de fraude para muchos, pero también un cambio radical que le resta poder al establishment como los gobiernos y los bancos.
Las criptomonedas se han disparado entre otras cosas por la facilidad para participar en ese mercado que no tiene intermediarios
Mientras todo esto sucede el Bitcoin marcaba la semana pasada precios récord nunca antes alcanzados, como los registrados el 13 de octubre, cuando llegó a ubicarse en 5.849 dólares por unidad.
Pero esto no quedó allí, pues las noticias saltaron a la vista al informar que el mercado de capitalización de Bitcoin llegó a traspasar los 95.000 millones, superando nada más y nada menos que la capitalización de mercado del banco estadounidense Goldman Sachs, que se calcula en 93.000 millones de dólares, según resaltaban los medios de comunicación.
¿Pero qué es lo que sucede?
Las criptomonedas se han disparado, entre otras cosas, por la facilidad para participar en ese mercado que no tiene intermediarios. Y por el uso cada vez más frecuente de estas monedas para adquirir bienes a través de Amazon, eBay y otras múltiples plataformas de comercio electrónico.
Es obvio que, por lo revolucionario y disruptivo de estas monedas virtuales, los gobiernos y reguladores cada vez les prestan más atención para controlar y regular estos mercados. Como todo modelo disruptivo los riesgos y la volatilidad son altos, hasta que se vaya consolidando y asimilando la nueva realidad y uso de las criptomonedas.
Pero también es cierto que los bancos ven una amenaza de perder el poder de intermediación y de manejo de los recursos de las personas y empresas, que por siglos ha hecho de este negocio uno de los más lucrativos.
Eso por un lado, y por el otro están los gobiernos -y aquí se entiende la actitud de China y Rusia- ante el temor de perder el control de la recaudación de impuestos, pues al no tener información sobre las transacciones que realizan los inversores en el mercado de criptomonedas es imposible pecharlos. Ya son muchos los opinadores que están escribiendo sobre este asunto.
Sin freno
Mientras todo esto sucede, esta semana se hará realidad en el mercado un nuevo emprendimiento de la mano de su creador: J.R. Willett, quien se empeñó en hacer realidad la idea de colocar un ATM o cajero automático para criptomonedas en cada esquina llamado UpToken.
¿Cómo lo está haciendo? Con una inversión de un millón de dólares que sale de su propio bolsillo y el apoyo de la empresa Coinme Inc., que ya cuenta con un know how probado, pues fue el primer operador de cajeros automáticos de Bitcoin licenciado en Estados Unidos y procesa millones de dólares cada mes.
Esta semana se hará realidad la idea de colocar un cajero automático para criptomonedas en cada esquina llamado UpToken
Llama la atención el arrojo de este estadounidense, quien hace pocos días en una entrevista dijo que había recibido amenazas de ser denunciado ante la Security Exchange Comission (SEC). Willet, quien es el inventor de la Initial Coin Offering (Oferta Inicial de Moneda), también conocida como COI, buscó como aliado a Mastercoin, hoy convertido en Omni, para adelantar esta iniciativa, en 2013.
De esta manera, con su nuevo proyecto, este ingeniero en computación tiene desde el lunes 16 de octubre de 2017 a UpToken como la criptodivisa que podrá intercambiarse en la red de cajeros automáticos criptográficos de Coinme. En el ínterin, el mundo se sorprende y trata de adaptarse -no sin ciertas dudas- a esta nueva revolución en el mercado.