María Rodríguez (ALN).- Un informe de Torino Capital subraya el problema central del mensaje de las autoridades venezolanas: no aclara qué incentivos tendrán los acreedores que participen en la reestructuración de la deuda. Pero aún hay más incógnitas que enumera este banco de inversión, como cuál es la propuesta del Gobierno y el cronograma de las negociaciones.
Trascienden más detalles sobre la primera reunión entre acreedores y autoridades venezolanas para iniciar el proceso de reestructuración de la deuda externa del país. Ya se dijo que el encuentro fue más político que financiero, cuando el Ejecutivo de Nicolás Maduro culpó del retraso en los pagos a las sanciones impuestas por Estados Unidos. Ahora, el banco de inversión Torino Capital da su visión del encuentro en un informe elaborado por el economista jefe Francisco Rodríguez. En este reporte, Torino Capital menciona cinco puntos en los que el Gobierno venezolano no despejó las dudas de los inversores.
1. Los incentivos para los acreedores
El banco de inversión subraya que “el problema central del mensaje del Gobierno venezolano, apartando la falta de interacción y detalles, es que no dejó claro cuáles eran los incentivos que los tenedores tendrían para participar en la reestructuración”. El texto añade que las autoridades venezolanas no presentaron ni el aliciente de una reforma económica ni la amenaza de dejar de pagar.
La deuda pública total del país asciende a casi 170.000 millones de dólares (144.000 millones de euros), y el segmento de los bonos públicos se ubica en 58.000 millones de dólares (49.300 millones de euros). De este volumen, 32.000 millones de dólares (27.200 millones de euros) son bonos de la República y el restante de la estatal petrolera PDVSA (26.000 millones de dólares / 22.000 millones de euros).
2. La propuesta de reestructuración
El gobierno de Maduro “no presentó una propuesta de reestructuración o refinanciamiento de la deuda, ni explicó cómo la refinanciación ayudaría a mejorar la capacidad de pago de la economía”, apunta Torino Capital.
El Gobierno de Maduro “no presentó una propuesta de reestructuración o refinanciamiento de la deuda”, apunta Torino Capital
No obstante, la firma sostiene que las autoridades venezolanas sí “esperan que el proceso de renegociación pueda servir para encontrar mecanismos para lidiar con este obstáculo, incluyendo la posibilidad de que los tenedores puedan presionar a las autoridades estadounidenses”.
En este camino, el Gobierno venezolano cuenta con el asesoramiento de un abogado especialista en reestructuraciones, al que habría contratado recientemente. Se trata de David Syed, quien trabaja con un equipo de la firma de abogados global Dentons para asesorar a Venezuela, tal como publica en exclusiva la agencia Reuters.
Según el perfil profesional que aparecía en la web de su anterior empresa (era socio del bufete internacional Orrick, Herrington & Sutcliffe Syed), estudió Derecho en la Universidad de Reims (Francia) y un master en este mismo campo en la Universidad de Exeter (Reino Unido). En ambas titulaciones se graduó con honores. En 2014 fue reconocido por la publicación estadounidense Best Lawyers como uno de los mejores abogados en la categoría de finanzas. Domina el inglés, el francés y el español.
3. Lo urgente de la situación
Otra de las conclusiones destacadas por Torino Capital sobre la reunión del lunes es que las autoridades venezolanas “no transmitieron de forma efectiva el sentido de urgencia en alcanzar una solución”. Un día después del encuentro, la agencia de calificación de riesgos internacional Standard & Poors (S&P) declaró la deuda soberana de Venezuela en estado parcial de “default” después de que incumpliera el abono de los intereses de dos bonos.
En este contexto se cruza la firma del acuerdo alcanzado este miércoles entre Rusia y Venezuela para la reestructuración de la deuda de más de 3.000 millones de dólares (2.500 millones de euros) que el país latinoamericano tiene con Moscú. No obstante, las negociaciones vienen de atrás. Ya en octubre Nicolás Maduro viajó a Rusia a pedir apoyo económico, aunque finalmente la visita fue más política y sólo obtuvo de Vladimir Putin una foto.
En el caso de China, este país no ofreció alivio para la deuda de Venezuela en el comunicado que lanzó este jueves el Ministerio de Exteriores, pero manifestó que confía en que el país latinoamericano podrá gestionar la situación, según publica El Nacional. “Creemos que el Gobierno y el pueblo de Venezuela son capaces de gestionar adecuadamente el problema de la deuda”, dijo Geng Shuang, el canciller chino, tal como reseñó la agencia Associated Press.
El alto funcionario agregó que espera que las partes implicadas “puedan solventar” el asunto a través de consultas y que “en el presente, la cooperación financiera entre China y Venezuela sigue como de costumbre”. No obstante, el pasado domingo Maduro se mostró más firme: “Los compromisos con la República China marchan perfecto”.
4. El cronograma para las negociaciones
“Aunque la situación es claramente importante para ellos, no hubo señales de que el Gobierno presionará o acelerará un cronograma para las negociaciones. Más bien, pareciera que este será un proceso largo y de resultados inciertos”, augura Torino Capital.
En este sentido, en el informe subrayan que “la reunión concluyó con el compromiso de establecer grupos de trabajo para tratar cuestiones específicas”, pero “con una línea de tiempo no especificada”.
Ante esta cuestión, el banco de inversión se pregunta por cuánto tiempo el Gobierno podrá cumplir con sus obligaciones si no se da una reestructuración. “El país actualmente tiene un superávit de cuenta corriente lo suficientemente amplio como para pagar sus bonos, siempre y cuando otras deudas se retrasen o se reestructuren”, precisa.
Torino Capital considera que el encuentro no se enfocó con una intención real de iniciar comunicaciones bilaterales con los inversores
Sin embargo, las últimas noticias sobre la producción petrolera, particularmente la caída de 130.000 barriles diarios en octubre, “sugieren que el país tendrá que hacer un recorte adicional de importaciones para estabilizar la cuenta corriente, una estrategia que puede no ser viable ni desde el punto de vista económico ni desde el punto de vista político”, concluye el banco.
5. Más detalles
Torino Capital destaca igualmente que en la reunión “no hubo oportunidad para que los tenedores de bonos hicieran preguntas; tampoco para que los otros miembros de la Comisión ofrecieran mayores detalles”.
El encuentro, de 30 minutos, consistió en la lectura de un comunicado por parte del vicepresidente venezolano, Tareck El Aissami, tras una breve introducción del vicepresidente de Economía, Wilmar Castro Soteldo. El Aissami incidió en las dificultades que el país enfrenta como consecuencia de las sanciones financieras de EEUU y pidió a los tenedores de bonos que cooperaran con el Gobierno para encontrar la forma de hacer frente a esta situación y alcanzar soluciones beneficiosas para todos. No obstante, no hubo margen para la réplica.
Por todo ello y por el hecho de que El Aissami, actualmente sancionado por EEUU, dirigiera la reunión, el banco de inversión considera que el encuentro no se enfocó con una intención real de iniciar comunicaciones bilaterales con los inversores.