Carlos Moreno (ALN).- Hoy el Tribunal General de la Unión Europea falló en contra de Nicolás Maduro y reiteró la validez del embargo de armas impuesto en 2017. El lunes se reúnen los cancilleres de la OEA para invocar el TIAR en contra del régimen de Maduro. Iván Duque expondrá en Naciones Unidas una batería de pruebas que constata la alianza de Maduro con las FARC y el ELN. La UE también lo sacudirá con nuevas sanciones, así lo prometieron si fracasaba la negociación facilitada por Noruega. Y se adelanta además la conformación de una Comisión de Investigación desde el Consejo de Derechos Humanos de la ONU tras el Informe Bachelet.
Nicolás Maduro y su régimen notan la oscuridad. Es realmente un “septiembre negro”. La diplomacia internacional está activada al máximo para estrecharle el cerco político y financiero como medida para lograr su salida del poder.
Son cuatro tormentas las que se le vienen a Maduro en pocos días y carece de oxígeno para enfrentarlas. Son cuatro frentes abiertos por donde lo sacudirán y desde donde podrían activarse más sanciones políticas y económicas.
Aunque la pesadilla de Maduro es la supuesta intervención militar en Venezuela promovida por los Estados Unidos y Colombia, la Casa Blanca ha dicho que no está contemplada la medida y ha reiterado, junto con los cancilleres de la OEA a favor del TIAR, que se busca la salida “pacífica y negociada”.
Hoy el Tribunal General de la UE falló en contra de Maduro y su régimen. Declaró no ha lugar los recursos que el régimen planteó en 2018 para frenar el embargo de armas que la UE había aprobado para evitar que continúe reprimiendo a los venezolanos.
Primera tormenta: El TIAR en la OEA
El próximo lunes se reúnen en Nueva York los cancilleres de Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Honduras, Haití, Estados Unidos, El Salvador, Guatemala, Paraguay, República Dominicana y la propia Venezuela representaba por la delegación del gobierno de Juan Guaidó, presidente encargado, para invocar la activación definitiva del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Así lo confirmó el embajador de Colombia en Estados Unidos, Francisco Santos.
El principal objetivo es “tomar la decisión de invocar el Tratado y a partir de ahí poder tomar las decisiones respectivas frente a las sanciones… de ninguna manera quiere decir que se apruebe el uso de fuerza militar”, comentó el Santos.
La medida se aceleró luego de que Carlos Holmes Trujillo, canciller de Colombia, solicitara el pasado 11 de septiembre ante el Consejo Permanente de la OEA, la activación del TIAR, argumentando, con una serie de pruebas e informes, la protección y la alianza del régimen de Nicolás Maduro y los grupos guerrilleros de las FARC y el ELN.
Maduro había disparado las alarmas en la región al manifestar públicamente en el Foro de Sao Paulo, una reunión de organizaciones de izquierda celebrada en Caracas en agosto pasado, que daba la bienvenida a Venezuela a Iván Márquez y Jesús Santrich (líderes guerrilleros), por ser “hombres de paz”.
Un mes después, Iván Márquez anunciaba en un vídeo el retorno de las FARC a las armas y el rompimiento de los acuerdos de paz firmados en La Habana en 2016.
Pero Maduro sigue en “alerta naranja” en la frontera con Colombia, con el despliegue de 3.000 militares y el sistema misilístico de Venezuela, a la espera de una agresión o de una intervención militar y señalando a Colombia de justificar una guerra contra Venezuela “fabricando falsos positivos”.
La opción de una intervención militar en Venezuela está descartada de momento, así Maduro la reitere y Vladimir Padrino López, su ministro de Defensa, advierta que la Fuerza Armada Nacional (FAN) está preparada para responder con la amenaza de convertir a América en un “terreno de guerra”.
El Departamento de Estado de los Estados Unidos, dirigido por Mike Pompeo, aseguró a principios de semana que el gobierno de Donald Trump buscaría acelerar la reunión de sus aliados para sacar adelante la activación del TIAR, el mecanismo de seguridad hemisférico pactado por 19 países que busca imprimir más presión para que Nicolás Maduro salga del poder.
El comunicado del Departamento de Estado hizo énfasis en que buscan aplicar sin demoras las “opciones económicas y políticas multilaterales”.
Así pues, este lunes se abriría la puerta a más sanciones en contra de Maduro, ya no sólo de Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea, sino también desde la propia Latinoamérica, lo que significaría una estrategia conjunta hemisférica.
El plano económico, según el documento del Departamento de Estado, sería preciso. El TIAR establece en su artículo 8 la posibilidad de romper relaciones comerciales y contempla: “la interrupción parcial o total de todas las relaciones económicas, o de las comunicaciones ferroviarias, marítimas, aéreas, postales, telegráficas, radiotelefónicas… y el empleo de la fuerza armada”, aunque este último punto, el de la intervención militar, ha sido desestimado por ahora y en cambio los países a favor del TIAR quieren una salida negociada.
Segunda tormenta: Colombia en la ONU
Iván Duque, presidente de Colombia, llevará al 74 periodo de sesiones de la Asamblea General de la ONU que se inicia el próximo martes, una “batería de pruebas” que demuestra la alianza del régimen de Nicolás Maduro con los insurgentes del ELN y también con las FARC que han decidido retomar la guerra contra el Estado colombiano al mando de Iván Márquez.
El diario ALnavío informó en exclusiva el pasado 4 de septiembre sobre la preparación del gobierno de Duque para la cita en Nueva York.
Una fuente de la Cancillería de Colombia precisó que el expediente estaba armado y contenía pruebas irrefutables de la protección y financiamiento del régimen de Maduro a los grupos guerrilleros.
El informe, que ya el mismo Iván Duque anunció que presentaría a los Estados miembro de la ONU, posee información precisa obtenida de conversaciones, imágenes satelitales de los asentamientos de las FARC y el ELN en Venezuela, correos interceptados entre guerrilleros y funcionarios del régimen de Maduro, informes de inteligencia militar, fotografías y grabaciones.
Pero Iván Duque no se quedará allí. Siendo Venezuela el punto más neurálgico de su presentación, primero por la amenaza del régimen de Maduro amparando a ejércitos guerrilleros (calificados como organizaciones terroristas) que declararon la guerra al Estado de Colombia y segundo por la incontrolable migración forzada de venezolanos hacia ese país que supera 1,6 millones de personas, producto de la crisis económica y humanitaria, el presidente de Colombia solicitará en la ONU la activación de la Resolución 1373.
La información la confirmó ayer el mismo Francisco Santos, embajador de Colombia en Estados Unidos.
La resolución 1373 es un instrumento de las Naciones Unidas aprobado por la totalidad de los Estados miembro para combatir el terrorismo y que contempla:
1. Hacer frente a las condiciones que propician la propagación del terrorismo.
2. Prevenir y combatir el terrorismo
3. Desarrollar la capacidad de los Estados miembro para prevenir y combatir el terrorismo y fortalecer el papel de las Naciones Unidas al respecto.
4. Garantizar universalmente los derechos humanos y el Estado de derecho como pilar fundamental contra el terrorismo.
De hecho, Duque, que ha rechazado reunirse con Maduro, tendrá una ventaja en la ONU. Podrá hablar directamente con Antonio Guterres, el secretario general, que abordará con especial atención el caso de Venezuela y que ha pedido a ambos gobiernos reunirse para bajar las tensiones. Maduro, por su parte, ha decidido enviar al canciller Jorge Arreaza y a la vicepresidenta Delcy Rodríguez en su representación.
Nicolás Maduro dijo el pasado 13 de septiembre que no iría a Nueva York a la Asamblea General de la ONU puesto que estaba más seguro en Venezuela.
Tercera tormenta: Sanciones de la Unión Europea
Federica Mogherini, la jefa de la diplomacia europea, había prometido incrementar las sanciones de tipo personal y sectorial contra el régimen de Maduro si las negociaciones en Oslo y Barbados fracasaban. Y Maduro las hizo fracasar.
Ahora una nueva tormenta se aproxima desde el Viejo Continente. La diplomática asegura que hay que “mantener las presiones en contra de Maduro” para llevarlo a una salida pacífica y negociada.
La confesión más grave de Maduro: El mundo se le pone chiquito
Hoy el Tribunal General de la Unión Europea ha avanzado bloqueando los intentos del régimen de Maduro de recurrir las decisiones de la UE y levantar las sanciones impuestas en 2017, cuando se dictó el embargo de armas para evitar la represión del régimen contra los venezolanos, un pacto alcanzado por los 28 países del bloque. El tribunal “procede a declarar la inadmisibilidad del recurso en su totalidad”, sentenció.
El régimen de Maduro había activado la defensa en la UE en febrero de 2018 y ahora ha salido derrotado. Una bofetada que le llega al régimen pocas horas antes de comenzar las tormentas del lunes próximo.
Cuarta tormenta: Comisión de investigación de la ONU
Tras la presentación de la última actualización del Informe Bachelet, el pasado 9 de septiembre, ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, la presión contra Maduro se incrementó.
La larga lista de violaciones, encarcelamientos, ejecuciones extrajudiciales, presos políticos y torturas resonó en la exposición de Michelle Bachelet, Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
El informe dio paso a la posibilidad de concretar una Comisión de Investigación por violaciones de derechos humanos en contra de Maduro y su régimen, una gestión que adelantaban ya varias ONGs y hasta universidades de Venezuela como: Amnistía Internacional, Cofavic, Espacio Público, Global Centre Of Responsability to Protect, Human Rights Watch, Provea, Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello, Civilis Derechos Humanos, Comisión Internacional de Juristas y Cepaz.
Una fuente de la Cancillería de Maduro en Caracas confirmó al diario ALnavío que la negativa de Maduro a ir a la Asamblea General de la ONU se debía a los resultados que podían derivarse si se activaba formalmente esa comisión, puesto que tomaba cada vez más fuerza en el Consejo de Derechos Humanos.
La fuente dijo que, pese a la autonomía de la Corte Penal Internacional, una investigación con resultados surgida desde la ONU podría motivar la retención de Maduro si salía de Venezuela.
El régimen mueve piezas en su intento de protegerse. Puso en marcha a su canciller Jorge Arreaza, quien busca alianzas para presentar un “Proyecto de Declaración Universal” contra las medidas coercitivas unilaterales, una respuesta que intenta frenar de algún modo todos los mecanismos internacionales que se configuran para lograr la salida de Maduro.
Han contratado a un europarlamentario italiano para frenar las sanciones de la UE, su nombre: Giuseppe Arlacchi, una especie de “supercanciller”, según confirma al diario ALnavío la fuente de la Cancillería de Maduro en Caracas.
Arlacchi, que opera desde la embajada de Maduro en Roma, tiene facultades para representar al régimen en la Unión Europea y la propia ONU. Su misión es también evitar que las aguas de las tormentas no sobrepasen la cabeza de Maduro. ¿Lo logrará?