Daniel Gómez (ALN).- Rodrigo García de la Cruz, director general de Finnovating, dice a ALnavío que en España “el proceso de digitalización interno de las grandes compañías es lento”. Aunque muchas vayan por el camino correcto, aún tienen “el reto de integrar la innovación externa”. De confiar en las pujantes startups del país.
Rodrigo García de la Cruz es el director general de Finnovating, la primera consultora de innovación disruptiva de España especializada en startups financieras y de seguros, más conocidas como fintech.
García se licenció en administración de empresas en la Universidad de Valladolid, y siguió formándose en el Instituto de Estudios Bursátiles de Madrid y en la London School of Economics.
Sabe de finanzas, y sabe de innovación. Ha liderado y fundado iniciativas como Accurate Quant, FinTech Iberoamérica y la Asociación Española de Fintech e Insurtech, y en la actualidad dedica la mayor parte de sus esfuerzos a Finnovatig.
A través de la consultora, busca fórmulas para acelerar los procesos de digitalización de las empresas españolas. Con estos fines han apoyado a Banco Santander, Telefónica, BBVA, así como a otras multinacionales del país. Sobe ello conversó con ALnavío.
Considera que lo que están haciendo las compañías españolas “no es suficiente”. García pide más esfuerzos a los directivos empresariales, a los dirigentes públicos y también a las universidades. Está convencido de que en España hay talento y, sobre todo, de que hay que aprovecharlo.
– ¿Es suficiente lo que están haciendo las empresas españolas?
– Es necesario, pero no suficiente. El proceso de digitalización interno de las grandes compañías es lento a pesar de los muchos recursos que están invirtiendo.
– ¿A qué se debe esa lentitud?
– La velocidad e inercia de estas corporaciones hacen que los procesos de transformación sean de innovación gradual. El reto está en la innovación abierta y cómo integrar la innovación externa, ya que la velocidad será mucho mayor a la vez que se integra más innovación disruptiva.
– ¿Se puede confiar en las startups españolas?
– Totalmente. En particular de los sectores de finanzas y seguros. Las startups llegan para acelerar la transformación digital en los sectores tradicionales. Tienen la facultad de incorporar la innovación y las nuevas tecnologías de forma mucho más ágil y eficiente.
– ¿Basta con que las grandes empresas lancen aceleradoras de startups para mejorar la innovación?
– En absoluto. Las aceleradoras cumplen un papel importante a la hora de generar contactos y establecer comunicación con el ecosistema. Pero es parcial y los objetivos de acelerar la digitalización apenas se cumplen. Hay que buscar procesos de integración de startups ya más maduros dentro de la actividad de las compañías.
– ¿La colaboración empresa-universidad en España es buena?
– La universidad tiene un papel muy importante, donde aún hace falta mucho más impulso e involucración en los temas relacionados con el emprendimiento.
– ¿Cuál es el papel de los reguladores para fomentar la innovación?
– Su papel es esencial para favorecer la innovación. Para esto nacen los sandbox, que son entornos controlados o espacios seguros de pruebas en los que las startups, fintech o entidades que se encuentran en estados iniciales de desarrollo de proyectos innovadores pueden emprender su actividad
– ¿España es un ecosistema favorable para las startups?
– España es el país con más startups fintech por habitante del mundo. Somos un país innovador, lleno de emprendedores y abierto al talento internacional. Los retos son dos: más inversión y regulación menos rígida. Para lo primero pedimos implicación pública, y lo segundo se solucionará en gran parte con el sandbox.
– Respecto a las grandes empresas, ¿acaso BBVA, Santander, Telefónica e Inditex están en un riesgo real ante el auge de Apple, Amazon y Google?
– Los GAFA (Google, Amazon, Facebook y Apple) ponen en riesgo a muchas compañías, ya que son plataformas que han sabido generar ecosistemas únicos de valor para los clientes, a la vez que se adelantan a lo que los clientes demandan con una gran experiencia de usuario. El reto es real, la única opción es la colaboración con la innovación externa.
– ¿Las empresas españolas se están adaptando a esta nueva era como toca?
– En su mayoría lo están haciendo bien; de hecho, algunas de ellas son referente mundial. Pero es un proceso lleno de retos, donde los comités de dirección van a tener que tomar en el futuro próximo decisiones arriesgadas relacionadas con la innovación y las nuevas tecnologías, con mucha visión y estrategia. Es un camino largo donde habrá grandes ganadores y muchos perdedores.