Redacción (ALN).- En apenas una semana, la cifra de muertos por la represión ejercida por el régimen de Ortega ha subido de 285 a 309, según datos de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH). El régimen de Daniel Ortega no ceja en su estrategia represiva frente a las protestas ciudadanas. La Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH) dijo este martes de que la cifra de muertos entre el 19 de abril y el 2 de julio fue de 309, según informó el periódico La Prensa. En el anterior informe, del 26 de junio, eran 285 las víctimas mortales de la represión en Nicaragua. Los ejecutores de los asesinatos son tanto miembros de las fuerzas de seguridad oficiales como paramilitares sandinistas. 253 de los fallecidos hasta ahora lo fueron por arma de fuego, y de ellos 70 recibieron disparos en la cabeza. Destaca también la altísima proporción de jóvenes que han fallecido. 25 tenían 17 años o menos, y otros 122 tenían entre 18 y 30 años. La inmensa mayoría de las víctimas, 297, eran civiles, mientras que 12 eran policías. La ANPDH ha denunciado el uso de centros ilegales de detención por parte de los paramilitares oficialistas en los que se recluyen a personas que participan en las protestas.