María Rodríguez (ALN).- Para BBVA Research “persisten dudas” sobre la capacidad del gobierno de Jair Bolsonaro de implementar reformas importantes en el país, como la de las pensiones. Si esta reforma no se aprueba, podría poner en riesgo “la recuperación gradual de la economía brasileña”. El equipo de Bolsonaro quiere llegar a un consenso cuanto antes. Pese a las prisas, Moody’s no cree que la reforma se apruebe antes del tercer trimestre. Mientras, el sector servicios acumula cuatro años de caídas.
BBVA Research estima que el Producto Interior Bruto de Brasil crecerá 2,2% en 2019, frente a 1,2% de 2018. Una previsión que refleja la recuperación gradual de la economía brasileña, pero no está exenta de riesgos. BBVA Research destaca dos en un informe: “La no aprobación de una reforma de la seguridad social (pensiones) y la falta de un ajuste fiscal significativo”.
Y es que, pese a que los anuncios económicos preliminares del gobierno de Jair Bolsonaro “son positivos” según la entidad, “persisten las dudas sobre la capacidad para implementar reformas importantes, incluida la de seguridad social”, sostiene BBVA Research.
La edad mínima de jubilación es el aspecto más controvertido de la reforma de pensiones
Y para disipar estas dudas, el tiempo apremia. Bolsonaro aseguró este miércoles que hablará con los líderes del Congreso y su equipo económico para tratar de llegar a un consenso sobre la reforma de las pensiones, según recoge Reuters. Lo dijo justo el día que salió del hospital, tras permanecer ingresado más de dos semanas recuperándose de una segunda cirugía que necesitaba tras la puñalada que recibió en un acto de campaña en septiembre.
En una entrevista con la cadena de televisión local Record, el presidente brasileño indicó que la edad mínima de jubilación es el aspecto más controvertido de la reforma, con propuestas que varían de 62 a 65 años para hombres y de 57 a 60 años para mujeres.
Actualmente los brasileños se retiran en promedio a los 56 años y las brasileñas a los 53, según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos. ¿Y cuánta pensión reciben? De media 70% del salario previo a la jubilación. Un sistema que parece no ser el adecuado para que la economía brasileña acelere. “No me gustaría tener que hacer la reforma de las pensiones, pero estoy obligado a hacerlo. De lo contrario el país podría quebrar en 2022 o 2023”, advirtió el mandatario en la entrevista.
El ministro de Economía brasileño, Paulo Guedes, ya dijo en enero que la reforma de las pensiones era el problema más acuciante al que se enfrenta Brasil. De ahí que prometiese, además de recortar el gasto, reformar el sistema de la seguridad social del país.
Pese a las prisas, la agencia de calificación Moody’s informó este miércoles que no ve posibilidad de que la reforma de las pensiones se apruebe antes del tercer trimestre de 2019.
Al margen de las pensiones, así evolucionan algunos de los principales sectores que mueven la economía de Brasil:
Sector servicios
El sector servicios de Brasil acumula cuatro años de caídas. No obstante, la mejora es evidente. Según la Encuesta Mensual de Servicios, cerró 2018 con un retroceso de 0,1%. En cambio, en 2015, 2016 y 2017 los descensos fueron de -3,6%, -5%, y -2,8% respectivamente.
Banca
Y mientras los servicios se recuperan, los beneficios de los principales bancos brasileños siguen aumentando. Dos ejemplos. El beneficio del Banco de Brasil creció más de 22% en 2018 gracias a una “atención especializada” y a “los avances en la estrategia digital”, informó la entidad. El de Itaú-Unibanco aumentó 4,2%. Destacaron una “reactivación” de la concesión de crédito, con el aumento de la demanda sobre todo de personas físicas y de las pequeñas y medianas empresas.
Industria minera
El mineral de hierro supuso 17% de las exportaciones brasileñas en 2018, generando unos ingresos de más de 20.000 millones de dólares. Pero no todo son alegrías. En enero una represa minera al sureste de Brasil, propiedad de la gigantesca minera Vale, colapsó y liberó una ola de desechos y toneladas de barro que arrolló todo lo que encontró a su paso. Causó la muerte de al menos 157 personas.