Antonio José Chinchetru (ALN).- En 2000, Jessica Zorogastua se agarró a una mesa cuando en una entrevista para ser becaria en una fundación vinculada al Partido Popular le dijeron que estaba demasiado preparada para el puesto. De tan peculiar manera logró que la contrataran. Comenzó así una trayectoria que le llevaría a ocupar diversos cargos que le permitieron conocer por dentro la Administración española. Esta experiencia ha sido fundamental para que la biotecnológica estadounidense Biogen la haya contratado como responsable de Asuntos Gubernamentales en España. Ahora representa ante el Gobierno y las comunidades autónomas a una empresa que ha desarrollado un tratamiento contra la atrofia muscular espinar, una enfermedad que es la principal causa de fallecimientos de bebés en Europa.
La empresa biotecnológica estadounidense Biogen, que ha desarrollado un tratamiento contra la rara enfermedad que es la principal causa de fallecimientos de bebés en Europa, tiene desde marzo a la peruana Jessica Zorogastua como Government Affairs Lead (responsable de Asuntos Gubernamentales) en España. Ella conoce bien el terreno, puesto que trabajó cinco años como jefa de Gabinete de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid. Entre medias, ha terminado una tesis doctoral sobre inmigración y ha dado clases en la universidad.
Llegó a España en “un momento en el que las empresas españolas estaban en una fase en la que no sabían trabajar con equipos diversos”
El camino recorrido hasta llegar a su actual responsabilidad ha sido largo. Llegó a Madrid en abril de 1998. Estaba casada con un español expatriado en Perú por motivos laborales. La nación suramericana “estaba creciendo, pero venía de una crisis muy inestable”, según recuerda en conversación con ALnavío. Ambos decidieron que la mejor opción era España. Licenciada en Ciencias de la Comunicación, en sus primeros años en el país se dedicó a actividades como diseño gráfico y ventas, pero quería trabajar en el sector que correspondía con sus estudios. “Era un momento en el que las empresas españolas estaban en una fase en la que no sabían trabajar con equipos diversos”, recuerda.
A través de un amigo llegó en 2000 a una entrevista de trabajo en la Fundación Cánovas del Castillo, vinculada al Partido Popular (PP). El puesto era modesto, de becaria en el departamento de publicaciones. Las funciones consistían en “organizar fotos, clasificar papelitos y cosas por el estilo”. Recuerda que el encargado de hacer la entrevista, quien sería su jefe y “hoy es un gran amigo”, le dio una respuesta muy habitual en España: “Tienes un currículum demasiado alto para un becario. Estás sobrecualificada. No te quiero aquí porque te vas a aburrir y me vas a dejar”.
Se ríe al recordar cómo reaccionó: “Estaba tan cansada de no hacer nada que tuviera que ver con mi profesión que, no sé por qué, me agarré con fuerza a la mesa y le dije ‘yo no me voy de aquí hasta que me contrates’. Se me quedó mirando atónito y me dijo ‘bueno, si no te vas a ir te contrato’”.
La Cánovas del Castillo se fusionó en 2003 con otras fundaciones de la órbita del PP para reconvertirse en la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), presidida por el expresidente del Gobierno, José María Aznar. Zorogastua se integró en la nueva estructura, como coordinadora de publicaciones. Un año después se incorporó a FAES un nuevo secretario general, Javier Fenández-Lasquetty, y ella aumentó sus responsabilidades para ser coordinadora de Publicaciones y Prensa.
Considera, al hablar de su paso por FAES, que “el Partido Popular ha sido muy abierto. Corría el riesgo de trabajar la parte de comunicación con una persona que no era de España, en un momento en que España todavía no tenía una apertura amplia hacia trabajadores cualificados extranjeros. Esa experiencia la tenían las multinacionales, pero la empresa española y los partidos políticos, que van por detrás de la empresa, no estaban acostumbrados”.
Cargos de responsabilidad en el Gobierno de Madrid
En 2005 saltó de la fundación a la Administración, para formar parte del Gabinete de la consejera de Inmigración, Lucía Figar. Zorogastua no estaba afiliada al PP, lo que no impidió que altos cargos de esta formación confiaran en ella. Pronto sería nombrada jefa de Gabinete en la Consejería.
Fernández-Lasquetty se hizo cargo de ese departamento del Ejecutivo autonómico en 2007, y en 2010 pasó a ocupar la cartera de Sanidad en el Gobierno regional. Zorogastua le acompañó en su nuevo puesto, también como persona de máxima confianza en el cargo de jefa de Gabinete. Los cinco años que estuvo ahí “fueron muy difíciles, porque vino una crisis y había que gestionar con presupuestos recortados, había que poner la libertad de elección y los médicos no querían. También había que abrir nuevos centros y era difícil de hacer con poco presupuesto, pero se hizo”.
Cuando, en 2015, Cristina Cifuentes llegó a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, se produjo su salida de la Administración. “Esto me ayudó a hacer bastantes cosas”, señala. “La primera, terminar la tesis doctoral, que después publiqué como libro. La tesis es sobre publicidad y medios de comunicación en torno a la inmigración. Me quedé en el mundo académico”. Después, ganó por concurso una plaza de profesora asociada en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. La siguiente etapa llega cuando es contratada por Biogen.
“Es un trabajo de estrechar los vínculos, encontrar sinergias, entre la Administración pública y la empresa”
Explica las funciones del cargo de Government Affairs Lead en la compañía: “Es un trabajo de estrechar los vínculos, encontrar sinergias, entre la Administración pública y la empresa”. Dice: “La investigación está en la innovación, en las moléculas, en las terapias genéticas, que son carísimas. Entonces, cómo pagar esa innovación por parte de la Administración supone un reto tanto para la Administración pública como para los laboratorios. Si la Administración comienza a tener un hueco muy grande hace insostenible el sistema. Y si no paga un precio justo por los medicamentos termina resintiéndose la investigación. Hay que encontrar un punto medio, porque ni los laboratorios quieren que se destruya la Sanidad, ni la Sanidad puede avanzar y dar mejores servicios sin los laboratorios”.
Su experiencia como jefa de Gabinete en la Consejería de Sanidad de Madrid es clave para el ejercicio de su trabajo. Explica: “Hay que conocer la Administración profundamente. En España es muy complejo, por tener 17 ‘mini administraciones’ (las comunidades autónomas). Hay que saber que tú negocias con el ministerio una cosa pero que luego, si el ministerio lo aprueba, tienes que ir a 17 ‘mini ministerios’ (consejerías) a hablar. Y cada ‘mini ministerio’ tiene sus propias reglas, normas y políticas”.
Tratamiento contra la atrofia muscular espinar
Aunque en el día a día trabaja con el equipo de Biogen en España, Zorogastua responde directamente ante la directora de Asuntos Corporativos de la firma en Estados Unidos. “Lo que ocurre”, explica, “es que en el momento de aplicar las políticas nacionales o regionales tienes que conocer muy bien el mercado, con lo que tu trabajo directo es con tu country manager. Recibes las directrices generales de la global, pero tienes que estar coordinado con todo el equipo nacional”.
Biogen acaba de desarrollar un tratamiento que ha sido la respuesta a una enfermedad rara que no tenía tratamiento hasta ahora, la atrofia muscular espinar
Biogen es un laboratorio farmacéutico especializado en neuroinvestigación. Acaba de desarrollar un tratamiento que ha sido la respuesta a una enfermedad rara que no tenía tratamiento hasta ahora, la atrofia muscular espinar. Zorogastua recuerda que “es una enfermedad bastante cruel con los niños. En su forma más grave es la primera causa de muerte de bebés en Europa. Han logrado hacer un medicamento que en muchos casos detiene la enfermedad y en otros evita que muchos de los síntomas aparezcan”.
“Da una oportunidad y, sobre todo, una esperanza a la familia”, dice. Y añade: “Antes era ‘tienes esta enfermedad y te vas a morir’. A partir de ahora es ‘tienes esta enfermedad y vamos a ver qué pasa. Ya hay una forma de detenerla, de tratarla’. Y tenemos que seguir avanzando”, afirma.
Zorogastua explica que el sector sanitario está sometido a fuertes regulaciones. Un ejemplo de ello sale cuando ALnavío le pregunta por el nombre del tratamiento que Biogen ha desarrollado contra la atrofia muscular espinar: “No puedo darlo, porque la regulación española no permite decir la marca porque se puede entender como publicidad. Así de regulado está el sector”.