Daniel Gómez (ALN).- Consolidada en España como la papelería número uno, Carlin prepara el salto hacia el mercado global. México es la prioridad, según confirmó a ALnavío la consejera delegada, Lydia Estremera. En este país, ya abrieron los dos primeros locales en marzo y prevén inaugurar un tercero también para 2018.
Carlin nació a lo grande, en un local de Madrid de 1.500 metros cuadrados. Esa primera tienda sorprendió. Era 1990 y enEspaña jamás se había visto una papelería de esas dimensiones. La sorpresa se tradujo en ventas, y las ventas en planes de expansión.
La firma montó la primera franquicia en menos de un año. En 1991, ya tenía cuatro establecimientos, por eso saltaron de Madrid hacia Valencia. De ahí a Galicia, Andalucía, Cataluña… consiguiendo en un lustro más de 50 locales por todo el país.
Hoy esa cifra es irrisoria. Carlin cuenta con 535 tiendas, la gran mayoría instaladas en España, donde despunta como la papelería número uno. En la compañía tienen claro que es el momento de expandirse hacia nuevos mercados.
En declaraciones a ALnavío, Lydia Estremera, consejera delegada de Carlin, confirmó que la empresa quiere hacerse fuerte en el exterior. Sobre todo, en México. “Acabamos de abrir este mes de marzo nuestras dos primeras tiendas, una en el estado de México y otra en Ciudad Satélite. Además, estamos preparando la apertura de otro local para este 2018”.
Además de México, la empresa ha concretado la expansión en Andorra, Portugal, Francia y Guinea Ecuatorial.
Preguntada por si barajan más aperturas en América Latina, Estremera dijo que no, por ahora. “No descartamos más tiendas en Latinoamérica, pero antes de todo esto, queremos afianzarnos en México. Estamos muy centrados en este país”.
Carlin es una de las marcas estrella de la feria Expofranquicia que se celebra en Madrid esta semana. La firma posee una de las principales redes de franquicias de España. Un modelo que ha sido clave en la expansión.
“No descartamos más tiendas en Latinoamérica, pero antes queremos afianzarnos en México”
Apuntó la consejera delegada que, a partir de 60.000 euros, se puede abrir un establecimiento de Carlin. “Estimamos que el retorno de la inversión tarda entre tres y cinco años, con un margen bruto de rentabilidad de aproximadamente 35%”.
Las herramientas de marketing, la página web, la negociación con los distribuidores, el montaje de la tienda y la instalación del equipo informático corren a cargo de la empresa.
Convivencia con lo digital
En estos casi 30 años, Carlin ha vivido muchas revoluciones: la del ordenador, los portátiles, las tabletas, los móviles y hasta los relojes. Una transformación digital que está afectando sectores tradicionales, como es el caso de las papelerías.
“La empresa siempre se ha adaptado a los tiempos. Pero al final, los niños tienen que seguir escribiendo, siguen necesitando un papel, siguen necesitando un lápiz… Es verdad que las cosas se reconvierten, pero eso no va a cambiar”, apuntó Estremera.
Buena muestra de esa reconversión es que la empresa tiene ahora un sitio web en el que vende bolígrafos, libretas, mochilas y cualquier material escolar y de oficina. “Es un apoyo más”, agregó.