Redacción (ALN).- Cristina Gallach, secretaria de Estado de Exteriores del gobierno de España, visitó Caracas en marzo. Allí conversó con todos aquellos que en Venezuela tienen poder de resolver la crisis.
La secretaria de Estado de Exteriores de España, Cristina Gallach, dijo este lunes que la política del gobierno con Venezuela es de «acompañamiento y no tutelaje» porque «son los propios venezolanos los que deben encontrar la salida a la crisis política de su país».
Las palabras de la diplomática se dieron en la Comisión de Asuntos Iberoamericanos del Senado, donde informó de la estrategia de España para Venezuela, así como de su visita a finales de marzo a Caracas. Visita en la que se entrevistó con representantes de la oposición, la sociedad civil y del gobierno.
Gallach, número dos de Exteriores, dice que el pilar de su política con Venezuela es «el realismo».
«Las cosas son como son y no como nos gustaría que fuesen», dijo, explicando que el realismo «implica tener interlocución con todos aquellos que tienen capacidad de producir cambios». Ahora mismo, quien controla la administración en Venezuela es el gobierno de Nicolás Maduro.
«Ser realistas quiere decir no ignorar tanto que estamos muy lejos de nuestra meta final», que es la «celebración de elecciones justas, libres y transparentes, como que un CNE [Consejo Nacional Electoral] que incluya a miembros con sensibilidad opositora es mejor que un CNE exclusivamente integrado por miembros afines al chavismo».
El CNE designado la semana pasada, criticado por PP, Ciudadanos y Vox en España, incluye a dos opositores de renombre entre los cinco rectores principales.
Gallach también dijo que la crisis de Venezuela suscita a España «la máxima atención y solidaridad respecto de la difícil situación del pueblo venezolano».
Sin embargo, critica que «a veces» advierte «que algunos planteamientos que se hacen sobre Venezuela obedecen más a consideraciones de política interna que a una voluntad genuina de aportar soluciones desde diagnósticos y propuestas legítimamente discrepantes».