Leticia Núñez (ALN).- Colombia nunca ha tenido un presidente de izquierda. Y según la internacionalista Beatriz de Majo tampoco lo tendrá en el próximo mandato. “Hay un gran temor a que Gustavo Petro provoque una metástasis en Colombia de la debacle económica venezolana”, asegura en declaraciones a ALnavío. Advierte que Petro sería “tan buen mandatario como Nicolás Maduro”. Por ello, vaticina que Iván Duque ganará las elecciones de este domingo. A pesar de que el candidato conservador anunció que si vence modificará partes de los acuerdos de paz, la experta descarta que los eche para atrás puesto que “un retroceso franco tendría como opositores a muchos de sus propios electores”. Disminuir la brecha social, luchar contra el narcotráfico y frenar la corrupción serán tareas urgentes.
Colombia elige este domingo al sucesor de Juan Manuel Santos. Compiten cinco candidatos: el conservador Iván Duque (Centro Democrático), el izquierdista Gustavo Petro (Colombia Humana), Sergio Fajardo, respaldado por sectores de izquierda y al frente de Coalición Colombia, Germán Vargas Lleras de centroderecha (Mejor Vargas Lleras) y Humberto de la Calle, quien fue jefe negociador en los diálogos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FARC), por el Partido Liberal.
No obstante, las encuestas auguran que ninguno conseguirá la mayoría absoluta en primera vuelta, por lo que habría balotaje el 17 de junio. El conservador Iván Duque, apoyado por el exmandatario Álvaro Uribe, es el favorito en todos los sondeos. “Está en capacidad de capitalizar más de la mitad de los votos en la primera medición”, dice Beatriz de Majo, internacionalista y miembro del consejo editorial del periódico El Nacional en declaraciones al diario ALnavío. No obstante, reconoce que “la cuesta es empinada”.
A quien no ve con opciones de llegar a la Casa de Nariño es a Petro. Colombia nunca ha tenido un presidente de izquierda y De Majo descarta que el populista vaya a romper esta tendencia. “En esta votación no va a triunfar ya que el destrozo de Venezuela les está haciendo ver a todos los colombianos que más les vale poner sus barbas en remojo en lo atinente a un posible gobierno de corte socialista o comunista como el del binomio Chávez-Maduro”.
Preguntada si Petro sería un buen mandatario, la internacionalista responde contundente: “Tan bueno como lo ha sido Maduro en Venezuela”. Y agrega: “Este tipo de presidentes de izquierda irrespetuosos de las normas, corruptos hasta los tuétanos y vendidos a la voluntad del castrismo cubano no caben ni en Colombia ni en otro país del vecindario”.
“Es muy desacertado que Santos no gaste la energía que le queda como presidente en conseguir el desarme total de las FARC”
De Majo rechaza que la juventud de Duque –tiene 41 años- sea un problema para gobernar. “Hay otros tan jóvenes como él que nadie cuestiona por ese motivo, como Emmanuel Macron en Francia”. En su opinión, “la edad no es determinante cuando existe la preparación profesional que ostenta Duque”. Además, señala: “Lo rodean personas con enorme kilometraje en la función pública”.
Duque ha sido el único candidato que ha anunciado que modificará algunos aspectos del acuerdo de paz que Santos firmó con las FARC. Precisamente, De Majo reprocha al presidente que “no gaste la energía que le queda como mandatario en conseguir el desarme total de la guerrilla, en detener el secuestro de jóvenes para las filas guerrilleras, en eliminar el narcotráfico”. Sobre las pretensiones del candidato, vaticina que “la letra del pacto subsistirá” y que Duque actuará sobre algunos elementos no resueltos como la entrega de armas y la reparación a las víctimas.
Finalmente, apunta que entre las tareas urgentes que tendrá que asumir el próximo presidente de Colombia está la batalla contra el narcotráfico y la lucha anticorrupción. También disminuir la brecha social y fortalecer la economía, a su juicio, “enclenque”. No queda ahí la lista. De Majo apunta un último reto: “Prestar mucha atención a la penetración de las lacras del chavismo que encuentra cómplices en suelo colombiano”.
– Históricamente Colombia ha registrado niveles de abstención elevados. ¿Por qué la gente no vota? ¿A qué se debe la desafección hacia la política?
– Los partidos políticos le han fallado a la población tradicionalmente en proveerles paz durante medio siglo, desde que empezaron las agresiones de los alzados en armas. Hay una desconfianza notable en el interior del país, sobre todo acerca de la capacidad de los gobernantes de resolverles sus problemas más inmediatos. Entonces, ¿por qué y para qué votar? Si a esto le agregamos los episodios de corrupción de funcionarios gubernamentales, el ciudadano de a pie no siente confianza de ningún género hacia su clase gobernante a la hora de votar.
– ¿Qué hay que hacer para convencer a los jóvenes de que deben ir a votar?
– Colombia tiene frente a sí un futuro muy incierto en lo político, en lo económico y en el crucial tema de la paz. A los jóvenes es preciso hacerles entender que el gobierno es el primer factor de cambio que puede haber en un país y que lo acertado es escoger bien. La vía es la participación electoral. No hacerlo es dejar en manos de terceros el futuro propio y el de los cercanos.
– Iván Duque ha prometido que si gana modificará los acuerdos de paz con las FARC. ¿Cree que los echará para atrás o es sólo una promesa electoral?
– No los echará para atrás. Un retroceso franco tendría como opositores a muchos de sus propios electores. Duque fue uno de los grandes defensores del ‘no’ en el referendo efectuado por Santos para validar el Acuerdo de La Habana. Pero recordemos, la mitad de los votantes estuvieron a favor de los acuerdos de La Habana. La letra del pacto subsistirá, pero Duque actuará sobre aquellos elementos del proceso que aún no están resueltos, como la entrega de armas, la administración del régimen especial de Justicia para la paz y la reparación a las víctimas.
– Juan Manuel Santos, sin embargo, dice que los acuerdos están blindados…
– Es muy desacertado de su parte no gastar la energía que le queda como presidente en conseguir el desarme total de la guerrilla, en detener el secuestro de jóvenes para las filas guerrilleras, en eliminar el narcotráfico.
– ¿Será la juventud de Duque un problema para gobernar Colombia en un momento tan decisivo como el actual?
– Es un hombre joven, pero hay otros tan jóvenes como él que nadie cuestiona por ese motivo, como Macron en Francia. La edad no es determinante cuando existe la preparación profesional que ostenta Duque. Y lo rodean personas con enorme kilometraje en la función pública. El país está bien equipado en recursos, industrias productivas e iniciativas extranjeras. Lo que hay es que ponerle orden, hacer que la economía sea eficiente, prestarle atención seria a disminuir la brecha social, batallar en serio contra lacras como el narcotráfico, controlar la corrupción y sostener fuerte el timón en materia de seguridad ciudadana. El país es muy respetado internacionalmente y no le van a faltar ayudas en ninguno de estos terrenos.
– ¿Cuál es su pronóstico para este domingo? ¿Cree que habrá segunda vuelta?
– Creo que el despunte de Petro, del cual se habla con demasiada pasión, está muy inflado por la propia prensa. Petro será un contendor de alguna significación, pero ni es capaz de ganar en una sola vuelta ni de alcanzar un porcentaje alto del electorado. Duque sí está en capacidad de capitalizar más de la mitad de los votos en la primera medición. La cuesta es empinada. Petro se está presentando a las urnas habiendo generado mucha reserva dentro del electorado, por su solidaridad con la revolución venezolana. Hay un gran temor a que provoque una metástasis en Colombia de la debacle económica venezolana. Si pasan a segunda vuelta y Petro es el contendor de Duque veremos un proceso de “todos contra Petro”. Creo que puedo afirmar que Duque será el próximo presidente de los neogranadinos.
– ¿Cómo se realinearían los distintos partidos? ¿Qué alianzas se atisban?
– Sólo la izquierda radical acompañaría a Petro en una segunda vuelta.
“El despunte de Petro, del cual se habla con demasiada pasión, está muy inflado por la propia prensa”
– ¿Por qué en Colombia nunca ha triunfado un candidato de izquierda?
– Porque el electorado que acude a votar está conformado principalmente por ciudadanos ilustrados de la clase media alta y baja. En la medida en que los estratos más bajos de la población se incorporen como electores, en esa misma medida las izquierdas, cuyos líderes saben explotar las fracturas sociales, tendrán más presencia. Además, en esta votación no va a triunfar ya que el destrozo del país venezolano les está haciendo ver a todos colombianos que más les vale poner sus barbas en remojo en lo atinente a un posible gobierno de corte socialista o comunista como el del binomio Chávez-Maduro.
– ¿Considera que Gustavo Petro podría romper esta tendencia?
– No.
– ¿Está preparada Colombia para tener un presidente de izquierda?
– Este tipo de presidentes de izquierda irrespetuosos de las normas, corruptos hasta los tuétanos como son los venezolanos, vendidos a la voluntad del castrismo cubano, pésimos y corruptos administradores de las administraciones, clientes de su propio beneficio económico, tributarios del negocio de la droga y que coquetean con el yihadismo, no caben ni en Colombia ni en otro país del vecindario.
– ¿Sería Petro un buen presidente?
– Tan bueno como lo ha sido Maduro en Venezuela.
– Santos dijo la semana pasada en Madrid que le habría gustado que las FARC hubieran tenido un resultado mejor en las elecciones. ¿Está de acuerdo?
– Eso es una barbaridad descomunal.
– ¿Hubiese sido lo mejor para despejar los fantasmas?
– No creo que haya fantasmas en torno a las FARC. Siguen siendo los mismos criminales narcotraficantes del pasado con una cobertura de civilidad y de paz que es una gran mentira. Se siguen dando de la mano con el chavismo-madurismo y con el castrismo. Son todos patos de un mismo charco.
– El acuerdo de paz diseña una especie de nueva ruta que va a requerir del concurso de las élites. ¿Ve al sector empresarial en actitud de esfuerzo conjunto con el nuevo presidente?
– Pienso que la etapa de convivencia pacífica con la guerrilla está aún por diseñar. Y aún es necesario precisar la determinación que tienen los exguerrilleros a entrar legítima y sinceramente en el juego democrático. Si esto se llegara a comprobar queda pendiente el tema de la reparación a los afectados de las luchas guerrilleras en contra de la sociedad. Y queda pendiente el drama de la reinserción de los combatientes guerrilleros. El empresariado colombiano ha sido históricamente batallador al margen del gobierno que le haya tocado, pero sí necesitan hoy a uno que le preste atención al redireccionamiento de la economía. Claro que harán causa común con un programa cuerdo de redespegue de la bonanza que llegaron a conocer en el pasado.
– Santos también dijo en Madrid que deja un país mejor. ¿Coincide con él?
– Mejor es un calificativo muy grueso para calificar a un país que tiene que plegarse a un acuerdo muy desigual que favorece nítidamente a la guerrilla. Deja un país diferente, a lo sumo. La economía aún es muy enclenque. Y el cultivo de droga aunado a la exportación de cocaína está en franco crecimiento con la ayuda de la narco-dictadura venezolana. No hay razones para sentirse feliz.
“Colombia va a terminar siendo mejor y mayor productor de petróleo que Venezuela”
– ¿Cuáles serán las tareas urgentes que tendrá que afrontar el próximo presidente de Colombia?
– La resolución de la fractura social del país, la eficiencia de su economía interna. La batalla contra el narcotráfico y la lucha anticorrupción serán vitales. Y es necesario prestarle mucha atención a la penetración de las lacras del chavismo que encuentra cómplices en suelo colombiano. Otro gran problema es buscar una salida viable social y económica a la inmigración desordenada de nuestros compatriotas venezolanos.
– El sector petrolero se encamina a producir un millón de barriles diarios. ¿Qué tan decisivo será para la economía?
– Colombia va a terminar siendo mejor y mayor productor de petróleo que Venezuela. Extender esa ventaja económica a otros sectores es también de suma importancia porque puede apuntalar otros sectores de la industria.
– ¿Cómo será la relación Colombia-Venezuela en caso de que gane Duque? ¿Y si gana Petro? ¿Cómo lo avizora?
– Con el actual gobierno venezolano no habrá relación ya que el gobierno de Duque, después del de Santos, no reconocerán las elecciones venezolanas y por tanto, en lo formal, no tendrán relaciones con el gobierno de Maduro, de mantenerse este en el poder. El comercio caerá a niveles muy bajos porque Venezuela no tiene capacidad ninguna de importación y dentro de la relación bilateral de Colombia con los Estados Unidos, Bogotá se eximirá de promover intercambios con Venezuela. Como no veo la opción de que gane Petro no creo bueno especular sobre ese escenario.
– ¿Cuán importantes serán las inversiones de venezolanos en Colombia en esta nueva etapa colombiana?
– Las inversiones privadas venezolanas en Colombia son muy pequeñas. Inversiones públicas no va a haber porque no hay capacidad de generación de ahorro en el lado este del Arauca y por lo tanto de inversión. Si gana Duque lo que puede haber es una avalancha de inversiones extranjeras de otros orígenes.