Daniel Gómez (ALN).- El Ministerio de Economía español señala que el capital proveniente de América Latina creció un 14% respecto a 2015 y alcanzó los 2.348 millones de euros en 2016. No solo fue de las pocas regiones donde aumentó el flujo, también supuso el crecimiento más llamativo. La inversión extranjera en España alcanzó los 23.476 millones de euros (aproximadamente 25.338 millones de dólares) brutos en 2016, cifra un 1,2% inferior a la del año anterior. Pese a la caída, el Ministerio de Economía hace una lectura positiva. “El volumen de 2016 es muy significativo porque se compara con un 2015 excepcional. Esta evolución se produce en medio de un débil contexto internacional, con caídas generalizadas en los flujos de inversión”, apuntó en un comunicado.
Esta contracción de flujos no afectó, sin embargo, a Latinoamérica. La región aportó 2.348 millones de euros (2.538 millones de dólares) a las arcas españolas, creciendo en 14 puntos respecto al ejercicio anterior. La inversión latinoamericana en España representa un 10% del total y es el mayor aumento de “inversión productiva” de 2016.
El Ministerio de Economía señala también que la inversión de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), de la que forman parte países latinoamericanos como México, Chile y Brasil, subió un 4,5%. En total, acaparan un 85%.
Por parte de la Unión Europea, los fondos, que representan el 50% de los flujos, cayeron un 21%. Datos que van más en línea con los vertidos por la Conferencia de Naciones Unidas de Comercio y Desarrollo (UNCTAD), los cuales prevén un frenazo de entre un 10% y 15%.
La contracción de flujos inversores no afectó a Latinoamérica
Según el comunicado del Ministerio de Economía, las inversiones productivas de los principales países de origen fueron “Estados Unidos, con 4.968 millones de euros (21,2% del volumen total y un incremento del 126%), seguido de Luxemburgo (2.474 millones, 10,5% del total); Países Bajos (2.231 millones, 9,5%), y Alemania (2.211 millones, 9,4%)”.
Por sectores, los principales destinos de la inversión extranjera fueron suministro de energía eléctrica y gas, con 4.071 millones (17,3% del total y un aumento del 10,1% sobre 2015), seguido de actividades inmobiliarias, con 3.223 millones (13,7% del total y un 11,2% de incremento), y servicios financieros, con 1.823 millones (7,8% del total y crecimiento del 242%). Por detrás se sitúan actividades auxiliares a los servicios financieros e ingeniería civil y construcción de edificios. Este último ocupó en 2015 el primer lugar de la clasificación, con 4.551 millones.
Cae la inversión española en Latinoamérica
El comunicado también refleja un descenso del flujo económico de España hacia América Latina, aunque no ofrece datos. “En 2016 aumentó la inversión española dirigida a la UE y disminuyó hacia otras zonas geográficas, como Latinoamérica y los países de la OCDE”. Sí concretan la inversión directa total en el extranjero, de 33.767 millones de euros en términos brutos, un 23% menos que en 2015.
A pesar del cóctel de datos, advierten que todas estas cifras suelen ser muy volátiles. “Hay que tener en cuenta que cinco operaciones pueden concentrar en torno al 85% de la inversión de un mes, con lo que el retraso en la presentación por parte de los inversores puede desvirtuar las comparaciones”.
Por ello, insisten en comparar los datos con las medias de los últimos años. “En concreto, la comparación de los datos de 2016 con los flujos de inversión brutos medios de los últimos cinco años refleja un aumento del 32% en términos brutos y del 66% en términos netos. Al tiempo, las desinversiones de 2016 fueron inferiores a la media del último quinquenio”, apuntó el ministerio.