(EFE).- La inflación española se colocó en mayo en el 3,2 % interanual, nueve décimas inferior a la tasa registrada en abril, por el abaratamiento de los carburantes y la menor subida de los alimentos y bebidas no alcohólicas.
Según datos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística, el incremento de los precios de los alimentos fue del 12 % en doce meses, casi un punto menos que en abril.
De las nueve décimas de disminución de la tasa general, la mayor parte se debieron a la caída del 3,7 % del transporte por la bajada de los carburantes. Dos décimas del descenso corresponden a los alimentos.
La inflación de los alimentos ha retrocedido al nivel de hace un año gracias a la caída del precio de la leche, del queso y de los huevos.
También se debe a un menor precio del pescado y el marisco, y a la estabilidad del pan y los cereales.