Oscar Medina (ALN).- La cita más importante en el mundo del tabaco se desarrolla ahora mismo en Cuba: el Festival Internacional del Habano, que arriba a la vigésima edición con múltiples razones para celebrar. Como ya es costumbre, la industria cubana presenta novedades ante un grupo de afortunados visitantes y al mismo tiempo anuncia buenas noticias en materia de negocios: 500 millones de dólares en ventas el año pasado.
Por estos días Cuba reivindica su posición de liderazgo y tradición en el mundo del tabaco premium: desde el 26 de febrero y hasta el 2 de marzo se desarrolla en la capital de la isla el Festival Internacional del Habano, un evento que celebra 20 ediciones y al que acuden aficionados y amantes del buen fumar de todas partes del mundo.
El estimado promedio de asistentes a estas citas anuales es de poco más de 2.000 personas. Y no se trata de una mera feria comercial, que también la hay. A lo largo de estos días se despliega una programación que se disfruta tabaco en mano. El plan incluye una gran fiesta de bienvenida que cada año cambia de escenario. En el festival XV, por ejemplo, se trató de una noche alucinante en la fortaleza de El Morro; y en esta ocasión la fiesta se hizo en el espacio más formal –aunque más acondicionado para la música- del Salón El Laguito, con la marca Cohiba como protagonista de la velada en el lanzamiento de la línea Cohiba Reserva 2014.
Las jornadas siguientes contemplan conferencias sobre diferentes aspectos del tabaco, clases de torcido, el campeonato internacional de Habanosommelier (en el que participan cubanos y extranjeros) y catas y degustaciones con diferentes armonías, todo esto en los salones del Palacio de Convenciones, una enorme estructura de 60.000 metros cuadrados inaugurada en 1979 y donde –por cierto- se realizaron las negociaciones de paz entre la guerrilla de las FARC y el Gobierno colombiano.
El día de las visitas es quizás el más atractivo para los aficionados (en este caso, fue el 27): es la gran oportunidad de hacer el viaje del tabaco desde su origen en las célebres plantaciones de Pinar del Río, en Vuelta Abajo. Y en otra jornada, el 1 de marzo, los visitantes tendrán la oportunidad de completar el recorrido conociendo las fábricas Partagás y La Corona.
Para quienes pueden
Durante los días y noches de evento Habanos S.A., la empresa que comercializa los puros cubanos, va presentando las novedades del año y los afortunados asistentes se contarán entre los primeros en degustarlas. Y así hasta la noche de gala que, en estricta etiqueta, se reserva para la presentación especial del portafolio, que en este caso es la línea Maduro de Partagás.
Esa noche también se lleva a cabo la subasta de humidores: lujosos contenedores de Habanos muy especiales hechos por artesanos de la isla, que terminan en manos de los mejores postores. El año pasado se recaudaron 1.560.000 dólares que, como siempre, fueron donados al sistema cubano de salud pública.
Como todo lo que se refiere al mundo del Habano, el festival es una celebración de lujo. El paquete completo de la programación de esta edición tuvo un costo de 2.075 dólares, contando los 500 dólares de la cena de gala, sin incluir, por supuesto, boleto de avión y hospedaje. La planificación de la cita contempla, afortunadamente, la posibilidad de invertir por separado de acuerdo con los intereses y posibilidades de cada quien: las actividades en el Palacio de Convenciones tienen una tarifa general de 400 dólares, la noche de bienvenida 350 dólares, el viaje a Pinar del Río cuesta 85 dólares y la visita a las fábricas 40 dólares.
Los reyes del mambo
La Corporación Habanos S.A. tiene el monopolio de la distribución y mercadeo de Habanos en el mundo. Sus productos -27 marcas premium- se comercializan en más de 150 países (con la excepción de Estados Unidos) y se ufanan de ser líderes en el segmento, con al menos 70% del mercado global. Es una empresa que pertenece a partes iguales al Estado cubano y a la española Altadis (que desde 2008 forma parte de la británica Imperial Tobacco).
Para los medios que dan cobertura al Festival del Habano uno de los momentos más interesantes es la rueda de prensa en la que la corporación presenta –a su manera muy reservada- los resultados de gestión del año anterior. En 2017 anunciaron que durante 2016 registraron una “cifra de negocios de 445 millones de dólares”, lo que representó un crecimiento de 5%. En realidad también es un número en torno al cual han estado las ventas a lo largo de la década: en 2012 fueron 416 millones y en 2014 hablaron de 447 millones de dólares.
España estuvo nuevamente a la cabeza como el país de mayor consumo, seguido por Francia, China, Alemania, Cuba y Suiza: en esas naciones se concentró el 50% de las ventas, siendo Cohiba la marca más productiva en términos de valor.
En esta ocasión, el lunes 26 de febrero los directivos de la corporación indicaron que España se mantuvo como el principal mercado. Francia, China, Alemania y Cuba completan la lista que agrupa 54% de las colocaciones. En América (excluyendo a Estados Unidos) se distribuyó 17% de lo vendido. Montecristo, como es usual, resultó la marca más vendida y Cohiba generó los mayores ingresos. El desempeño general mejoró, incluso con un incremento en las ventas dentro de la propia Cuba que podría explicarse por el turismo estadounidense. 2017 marcó un nuevo techo: 500 millones de dólares en ventas. O, como dicen por allá, en “cifra de negocios”. Así que hay sobradas razones para celebrar en La Habana.