Redacción (ALN).- Un astuto viajero de nacionalidad china logró burlar el sistema del Aeropuerto Internacional de Xi’an en China, para obtener acceso ilimitado al lujoso salón VIP.
Su ingeniosa estrategia consistió en comer gratis y disfrutar de una variedad de manjares sin gastar dinero ni subir a un avión durante un año.
Todo comenzó con la compra de un boleto de primera clase, completamente reembolsable por un año. Con este simple truco, obtuvo acceso ilimitado al área exclusiva del aeropuerto, donde los pasajeros VIP pueden disfrutar de comidas y bebidas de alta calidad completamete gratis.
La historia, que se hizo viral en redes sociales, revela una serie de más de 300 reprogramaciones de vuelo. Este viajero, todo un experto en la materia, encontró una laguna en las normas de las aerolíneas y la aprovechó al máximo.
Según el periódico chino Kwong Wah Yit Poh, este caso ha puesto en evidencia las vulnerabilidades de los sistemas de las aerolíneas y ha generado un intenso debate sobre las políticas de acceso a los salones VIP.
La estrategia: reservar, comer y reprogramar
Este “frecuente comensal”, como lo denominaron los medios, utilizó el boleto de primera clase para acceder al salón VIP, donde aprovechaba las facilidades que la aerolínea ofrece exclusivamente a pasajeros de esta categoría. Para ello, simplemente debía mostrar su boleto a los empleados del salón antes de cada vuelo programado.
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Al llegar, se le permitía el acceso y podía disfrutar de una comida completa, tal como lo haría cualquier pasajero de primera clase. Sin embargo, en lugar de abordar su vuelo, el hombre reprogramaba su boleto para el día siguiente, un proceso que repitió diariamente durante casi un año.
Eventualmente, los empleados de Eastern China Airlines notaron el patrón de reprogramaciones. Tras revisar el caso, la aerolínea confrontó al pasajero, quien decidió cancelar su boleto en lugar de continuar con la práctica. La compañía aérea, aunque consciente de la particularidad de la situación, admitió que no podía tomar acciones legales, ya que el hombre no violó ninguna política formal.
Con información de Infobae