Daniel Gómez (ALN).- En menos de un mes, BBVA vuelve a revisar a la baja las previsiones de crecimiento para el tercer trimestre de 2018. Persisten las dudas y la volatilidad sobre la demanda externa, la creación de empleo pierde fuelle, y como consecuencia, la economía española apenas crecerá 0,6% entre junio y septiembre, una décima menos de lo esperado.
Mientras los políticos españoles claman contra los escándalos académicos, contra la tesis doctoral del mandatario, Pedro Sánchez, contra el virus de los másteres que amenaza al presidente del PP, Pablo Casado, la economía sigue mostrando síntomas de debilidad.
En menos de un mes, BBVA Research revisa de nuevo a la baja las estimaciones de crecimiento para el tercer trimestre de 2018. El Producto Interior Bruto (PIB) progresará 0,6%, una décima menos de lo pronosticado por el banco el 20 de agosto.
El turismo este verano fue “menos dinámico de lo que se esperaba a principios de la temporada”
Ya en el segundo trimestre, el equipo de investigación de BBVA redujo dos décimas las proyecciones. Hasta junio, la economía se expandió 0,6% y no 0,8% como se calculó en un principio. Eso refuerza los pronósticos a la baja hechos por BBVA para 2018. Calculan que el PIB se incremente 2,9% este año, tres décimas menos que en 2017.
La demanda externa y la recuperación del mercado laboral siguen siendo los grandes retos para España, dice BBVA. Por su parte, la inflación dará una tregua pues el índice de precios al consumo general se mantuvo en 2,2%, en línea con el último mes.
“Hacia adelante, es de prever que la inflación mantenga una trayectoria de desaceleración gradual, tras haber dejado atrás los repuntes causados por la subida del precio del petróleo durante el primer semestre del año. En este contexto, se estima que la inflación subyacente [excluye energía y alimentos] se mantenga ligeramente por debajo del 1% en lo que resta del ejercicio económico”, afirma el banco.
Alta volatilidad, dudas y débiles datos de empleo
Respecto a la demanda externa, “la volatilidad sigue siendo elevada, y persisten algunas dudas en el corto plazo sobre las exportaciones de servicios”. El banco también recuerda que, en los primeros meses del año, el comportamiento de este indicador “decepcionó”, por lo que es lógico que en la segunda mitad de 2018 “vuelva a terreno positivo”.
BBVA Research también destaca que el turismo este verano fue “menos dinámico de lo que se esperaba a principios de la temporada”. Incluso, no descartan “un retroceso de la afluencia de turistas” de cara al tercer trimestre.
El mercado laboral también preocupa. Y lo hace por dos motivos, según BBVA. Primero, porque en el primer semestre se crearon 146.167 empleos. Una mejora trimestral de 0,8%, pero una caída de 0,1% respecto al mismo periodo de 2017. El segundo motivo tiene que ver con la productividad. Es 0,2% más baja que hace un año.
Otro factor complementario a este análisis son los datos publicados por el Ministerio de Trabajo a principios de septiembre. El número de afiliados a la Seguridad Social cayó casi 203.000 en agosto. Una caída mensual de 1,07%. Hay que remontarse a 2008 para ver una cifra peor (Leer más: Los malos datos de empleo confirman la desaceleración de la economía española).
La demanda doméstica sigue apoyando la economía
BBVA Research apunta que la demanda doméstica sigue siendo el soporte de la economía en el tercer trimestre. “Los indicadores de gasto de los consumidores, los registros del mercado laboral y las estimaciones de la respuesta al impulso fiscal incorporado en los Presupuestos Generales de 2018 respaldan una recuperación del consumo privado”.
Agregan que los indicadores de ejecución presupuestaria “sugieren que el ritmo de avance del consumo público se podría mantener relativamente estable”. En lo que respecta a la inversión, la residencial seguirá en crecimiento “aunque con menor ímpetu que en el segundo trimestre”, y los flujos de capital destinados a maquinaria y equipo serán “prácticamente nulos” entre junio y septiembre.