Leticia Núñez (ALN).- La solicitud de apoyo financiero por parte de Argentina al Fondo Monetario Internacional encendió todas las alarmas. Sin embargo, María Ángeles Ruiz Ezpeleta, profesora de comercio internacional en la EAE Business School, sostiene que “la crisis argentina no es actual, simplemente ha salido ahora a la luz”. En declaraciones a ALnavío, asegura que el rescate “es lo mejor que podía hacer Macri” y destaca que la política económica va en la buena dirección. En 2017, Argentina creció 2,9% y la inflación se redujo de 40% a 22,4%.
“Argentina está en crisis desde hace muchos años y los últimos tres han sido terribles”, advierte de entrada María Ángeles Ruiz Ezpeleta, profesora de comercio internacional en la EAE Business School (Escuela de Administración de Empresas) en Madrid.
Por ello, y tras la devaluación del peso respecto al dólar –perdió 7% de valor en la última semana- y la elevada inflación –22,4% al cierre de 2017-, la docente considera que acudir al Fondo Monetario Internacional “es lo mejor que podía hacer Mauricio Macri. Si no inyecta dinero en la economía, no se puede frenar la inflación”.
Ahí están los datos. La economía creció 2,9% en 2017 y la inflación cayó de 40% en 2016 a 22,4% en 2017. “No es un fracaso. A nivel macroeconómico, la política de Macri ha sido estupenda”, dice en declaraciones al diario ALnavío. Además, considera que estas turbulencias no tienen por qué afectar a las empresas españolas. “Han vivido la recesión y el aumento de la inflación desde hace varios años. Están acostumbradas”.
Ruiz Ezpeleta sólo le hace una crítica a Macri: el momento político. “Económicamente lo ha hecho bien, políticamente no ha elegido el momento adecuado”.
– ¿Por qué Macri ha tomado una decisión tan impopular?
– La crisis argentina no es actual, sólo que ha salido a la luz ahora. Argentina está en crisis desde hace muchos años y los últimos tres han sido terribles. Todo el mundo se ha asustado cuando Macri ha pedido al FMI, pero si analizamos, desde 2015 el problema de Argentina es una inflación enorme, una devaluación enorme y un interés interno de 40%. Desde 2015 a 2018 la inflación ha sido de 80%: en 2015 fue de 30%, en 2016 de 40% y gracias a las políticas de Macri se pudo bajar en 2017 a 22,4%. Las políticas han mejorado parte de la situación. De hecho, en 2016 Argentina estaba en recesión y en 2017 creció 2,9%. Lo que no ha podido evitar Macri es la devaluación peso-dólar. Pero esto es endémico. Años y años. No es que ahora van a entrar en una crisis, sino que llevan tres años en esta crisis profunda. Ha llegado un momento en que ha explotado. ¿Qué puede pasar? Desde el punto de vista económico, pedir esto es lo mejor que podía hacer Macri. Si no inyecta dinero en la economía, no se puede frenar la inflación. El problema es que haya una revolución social, que haya mucha propaganda y que se produzca una fuga de capitales. Cuando se van los inversores, hay más inflación. Es algo que no ha podido evitar. No veo que la situación tenga que empeorar a no ser que todo lo que ha salido a la luz cree pánico.
– ¿No es un fracaso de la política de Macri?
– No es un fracaso, ahí están los indicadores económicos. A nivel macroeconómico, la política de Macri ha sido estupenda. Ha crecido 2,9%. A nivel del pueblo, no. Si todo el crecimiento lo dedicas sólo a retribuir el capital y no retribuyes el trabajo, destruyes la clase media y eso es un problema porque quien consume es la clase media. El pueblo se ha ido empobreciendo poco a poco. Macri no ha redistribuido bien las rentas.
– ¿Cómo puede afectar esto a las empresas españolas?
– Hay dos tipos: las que están implantadas y las que exportan. Las que están implantadas han vivido la recesión y el aumento de la inflación desde hace varios años. No tiene por qué afectar. Como llevan muchos años, están adaptadas. El interés es 40%, cuando en Europa es negativo. Es decir, uno invierte allí, deja dinero y tiene 40% de beneficio. Aun así, no ha conseguido que los capitales se queden por miedo a que el país tenga una quiebra y no pueda pagar la deuda. Si se produce un problema social y Macri tiene que hacer políticas distintas, se frenarían las políticas expansivas que ha realizado hasta ahora y habría menos obra pública, lo que podría afectar a alguna empresa. Pero, en general, las empresas españolas ya están en un país con crisis. La crisis no ha empeorado. Lo único que ha empeorado es el cambio peso-dólar. La inflación y el crecimiento no están peor que hace tres años. Las que están exportando están asustadas. El cambio es tremendo: ha pasado de 13 pesos en 2015 a 22,6 ahora. Es lo que más asusta. Los que exportan son menos competitivos porque con el cambio el producto es caro. Pero a esto estamos acostumbrados.
– Los gobiernos peronistas evitaron recurrir al FMI. Sin embargo, Macri, con un discurso del cambio, alborota el fantasma de la entrega a potencias imperiales. ¿Es una mala señal para los países de América Latina que han optado por el cambio?
– No es un problema de izquierda o derecha. Cuando hay una mejora macroeconómica, crece el PIB, y este crecimiento ha de retribuir de forma coherente el trabajo y el capital. Tan malo es un gobierno de izquierda que no quiere retribuir el capital como uno de derecha que no retribuye el trabajo. Desde el punto de vista macroeconómico, las políticas, sean de izquierda o de derecha, si son expansivas, mejoran el PIB. Más que una mala señal lo que sí puede haber es un efecto propagandístico. Si el pueblo no entiende que estas políticas han llevado a una mejor situación macroeconómica, pese a que a ellos no les haya llegado la mejora, sí que puede influir. Puede ser que los pueblos de los otros países no quieran el cambio. No es tanto político como propagandístico.
– ¿Teme un efecto contagio en Brasil?
– No tiene por qué. El hecho de que alguien pida un rescate no tiene por qué tener un efecto contagio. Grecia lo pidió y no pasó nada. Pero sí puede haber contagio en la situación social. No sirve de nada mejorar los indicadores económicos si no redistribuyes bien las rentas. Este es el problema básico.
“El hecho de que alguien pida un rescate no tiene por qué tener un efecto contagio”
– ¿Llega la decisión de Macri en un mal momento?
– Sí, llega en mal momento. Lo único que le podría criticar a Macri es por qué no lo ha hecho antes. Cuando él entró y vio que había tal deuda, cabe plantearse por qué no lo pidió antes. Económicamente lo ha hecho bien, políticamente no ha elegido el momento adecuado. Me fijaría en los rescates que hemos pedido en Europa. Quienes han pedido un rescate no han empeorado. Esto económicamente no es negativo. Los indicadores demuestran que ha hecho un buen trabajo en 2017, lo que pasa es que en 2018 ha habido un momento en que el dólar se revalorizó y esto hizo que aún estuviera peor la devaluación y que seguramente no habrá podido aguantar más la deuda. Esto ha pasado en España. Esperemos que lo explique bien, porque si sigue habiendo más empresas que se vayan de Argentina, lo que ha conseguido mejorar se estropeará.
– Como aspecto positivo, ¿Argentina será más barata para las inversiones y el turismo?
– Esto ya es así. La devaluación viene de tres años antes. A pesar de que el interés para las inversiones esté en 40%, los inversores no van. Tienen miedo, y el miedo es muy poderoso. No van desde hace muchos años. No es que no vayan a ir ahora porque Macri haya pedido el rescate. La crisis es endémica. Argentina está mal desde hace años. Es negativo para los que exportan pero es positivo para los que invierten y los turistas.