Redacción (ALN) .- La actriz Daniella Navarro confesó una de las peores etapas de su vida durante su participando en el reality, La Casa de los Famosos, que transmite Telemundo. Y es que la venezolana afirmó que fue abusada por su abuelo.
«Y viene una de las peores etapa de mi vida, que fue ser abusada por mi abuelo; y no poder decir absolutamente nada, porque ya sentía que yo era responsable de que mi mamá tuviera el corazón roto», expresó.
Además, indicó que no quería romperle el corazón a su madre diciéndole que «su papá abusaba de nosotras y seguí guardando rabia en mi corazón.
«Pero mi mamá me regaló lo que era mi mejor amigo hoy en la actualidad que es mi hermano, Carlos Henrique; y decidí no romper la felicidad que eso había traído a la familia y me lo guarde hasta mis 25 años», manifestó Daniella Navarro entre lágrimas.
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Daniella Navarro estuvo a punto de perder sus piernas
Daniella Navarro también contó que se casó a los 21 años y la presión por cumplir con los estándares de belleza la llevó a inyectarse sustancias en las piernas.
«Como me casé tan jovencita mis emociones y mi autoestima, que no venía muy bien por todo lo que ya han visto; no estaba reafirmada y esta persona en vez de ayudarme la empeoró. Empecé a hacer cosas que no debía hacer como poner sustancias en mi cuerpo que no eran correctas, inyectarme [en las] piernas por tratar de compensar el estándar que no era el mío», relató.
En ese sentido, comentó que estuvo a punto de perder sus piernas tras la llegada de su hija.
«Con la llegada de mi princesa empiezo a sufrir un problema en mis piernas cuando estaba embarazada; y se corría el riesgo de que si hacía tratamiento mi hija podía venir con alguna condición. Era que mi hija estuviera bien o eran mis piernas y yo decidí que fuera mi hija y no quise hacer más tratamiento», explicó.
«En el 2019 un médico dijo que ya no podía hacer nada por mis piernas y que para que no tuviera una trombosis o algo referente al corazón iban a tener que cortar un pedazo. Mi madre y yo trabajamos hasta más no poder [con] los tratamientos que nos sugerían. Pero en los Estados Unidos ninguno funcionó; y yo decía que si me iban a quitar una parte de mi cuerpo lo hicieran en mi país. Afortunadamente cuando llegué a mi país un doctor encontró un tratamiento que me ha mantenido tranquila y alejada de cortarme alguna de mis piernas», expresó.
Con información de People en Español