Redacción (ALN).- La Comisión Interamericana de Derechos Humanos condena las “graves violaciones” a los derechos humanos de los manifestantes en Nicaragua cometidas por la fuerza pública y grupos armados simpatizantes del presidente Daniel Ortega. Habla de “detenciones ilegales, prácticas de tortura, tratos crueles inhumanos y ataques contra la prensa”.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó lo que considera “graves violaciones” a los derechos humanos de los manifestantes en la “represión” a las protestas opositoras, cometidas por la fuerza pública y grupos armados simpatizantes del presidente Daniel Ortega. En sus observaciones preliminares, recogidas por la agencia Reuters, el comité de la CIDH en Nicaragua aseguró que hubo 76 muertos en un mes de violentas protestas, la mayoría por heridas de armas de fuego, y uso excesivo de la fuerza por parte de cuerpos de seguridad del Estado y de terceros. “La comisión observa el alto grado de represión de agentes antimotines contra las manifestaciones”, dijo Antonia Urrejola, comisionada de la CIDH. “Varios testimonios hablan del uso de francotiradores (…) Estos graves hechos indican la posibilidad de que se habrían registrado ejecuciones extrajudiciales”. La CIDH, una de las dos entidades del sistema interamericano de protección de derechos humanos, dijo que además de las decenas de muertos y centenares de heridos también se produjeron “detenciones ilegales y arbitrarias y prácticas de tortura, tratos crueles inhumanos y degradantes, censura y ataques contra la prensa y otras formas de amedrentamiento”. La CIDH instó al régimen de Ortega y Rosario Murillo a cesar “de inmediato la represión” a las protestas, juzgar a los responsables y crear un mecanismo de investigación internacional sobre los hechos ocurridos.