Redacción (ALN).- El crecimiento de la economía y los bajos niveles de desempleo en EEUU favorecen que el envío de remesas hacia México se haya disparado en el mes de abril, cuando sumaron 2.716 millones de dólares. Es la mayor cifra registrada en un solo mes, y representa un incremento interanual de 18%.
El flujo de remesas hacia México presentó un crecimiento de 17,9% en el mes de abril, hasta sumar un total de 2.716,9 millones de dólares, según datos del Banco de México recogidos y analizados por BBVA Research.
El centro de estudios de la entidad financiera considera que esta evolución se ha visto favorecida por el crecimiento del Producto Interno Bruto y los bajos niveles de desempleo en Estados Unidos (3,9%). Según el informe, esto “configura un entorno positivo para el envío de remesas, que se espera superen los 30.500 millones de dólares para el cierre del año”.
El envío de dinero hacia México alcanzó en abril un total de 29.576 millones de dólares acumulados en 12 meses. El crecimiento del flujo de remesas en el cuarto mes del año se debió en mayor medida al incremento de 13% en el número de operaciones de envío de dinero, mientras que el envío promedio presentó un crecimiento mucho más moderado, de 4,6% respecto al año pasado, según BBVA Research.
Los 2.716,9 millones de dólares registrados en abril representan el mayor monto monetario que se ha recibido en México en un solo mes. Con este nuevo dato, se supera el anterior récord, que se había alcanzado hace apenas unos pocos meses. En octubre de 2017 los envíos sumaron 2.642,7 millones de dólares. Esa cifra se debió, según el estudio, en gran medida a la incertidumbre con relación a las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y a la depreciación del peso mexicano.
Otro aspecto que destaca BBVA de los datos de abril es que, por primera vez desde inicios de este año, las remesas presentaron una tasa de crecimiento positiva en términos reales, al situarse en 1,3%. Esta evolución positiva en términos reales no se había producido desde noviembre de 2017. Esto se debe a que el monto de remesas enviado logró compensar el efecto del tipo de cambio de un peso más apreciado y una inflación más alta comparado con el mismo mes de 2017.