María Rodríguez (ALN).- El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela sostiene que la situación en el país gobernado por Nicolás Maduro ha subido de nivel: de ser un “problema local”, ahora es “mundial”. Lo achaca al éxodo masivo de venezolanos, al crimen organizado, a la desestabilización democrática y a la violencia en las calles. Borges hizo estas declaraciones en París, donde inició la gira europea que le ha llevado este martes a reunirse con el presidente español, Mariano Rajoy, en Madrid.
Julio Borges, presidente de la Asamblea Nacional venezolana y diputado opositor, asegura que la crisis económica, política y social que sufre el país gobernado por Nicolás Maduro ha subido de nivel. “Es impresionante la preocupación por el caso venezolano. Antes era un problema local, luego regional y ahora es un problema mundial”, afirmó Borges este lunes en París tras un encuentro que mantuvo con el presidente francés, Emmanuel Macron y en el que se percató de la preocupación que suscita globalmente la situación venezolana. La visita de Borges a Francia se enmarca en una gira europea que incluye reuniones con mandatarios de España, Alemania y Reino Unido para denunciar la crisis humanitaria que sufre Venezuela.
En Francia, Borges enumeró las causas que explican esta escalada en la crisis venezolana. En concreto, afirmó que se debe “al problema migratorio (más de dos millones de venezolanos viven fuera del país), al crimen organizado, a la desestabilización democrática y a la violencia”, en una Venezuela donde ya han muerto más de 130 personas durante las protestas en los últimos cuatro meses, según medios de la región. En este sentido, Mercedes de Freitas, directora ejecutiva de Transparencia Venezuela ya declaró rotunda: “El Estado [venezolano] no ha hecho nada por desarmar a los delincuentes o combatir la delincuencia organizada, sino que la ha promovido”.
Nuestro pronunciamiento a la salida de la reunión con Presidente de Francia @EmmanuelMacron #4Sep https://t.co/3n8gKOXHPp
— Julio Borges (@JulioBorges) 4 de septiembre de 2017
Por su parte, el presidente francés endureció el tono ante la crisis venezolana a finales de agosto al calificar por primera vez al gobierno de Nicolás Maduro como una “dictadura”. Preguntado en París por esta declaración, Borges agradeció la posición del mandatario francés porque “clarifica que hay una visión nítida de lo que sucede en el país” y “hace que todas las democracias en el mundo sientan el problema venezolano como uno propio, como un problema que incluso afecta a la política interna del país”.
Los intereses económicos que París se juega en el país latinoamericano se concentran en el sector de los hidrocarburos, de la electricidad y del transporte urbano. Según recoge la web de la embajada de Francia en Venezuela en el apartado “relaciones económicas” (actualizado por última vez en enero de 2015), la esencia de las inversiones concierne los desarrollos petrolíferos y gasísticos efectuados por Total, presente en Venezuela desde hace más de 30 años, y por Perenco, empresa anglofrancesa.
Julio Borges afirma que es “impresionante la preocupación por el caso venezolano”
Según el diario El Universal, esta última mantiene una asociación estratégica con la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) para el desarrollo de las empresas mixtas Petrowarao y Baripetrol. En estas firmas, PDVSA cuenta con el 60% de la participación accionarial y Perenco con el 40% restante.
Por otro lado, desde la embajada estiman en unos 5.000 millones de euros (6.000 millones de dólares) el stock de la inversión directa de Francia a Venezuela, lo que ubica al país galo entre los cinco primeros inversores. A la inversa, desde esta institución reconocen que los flujos de inversión hacia Francia son “muy limitados”. En 2015, se estimaron por debajo del millón de euros al año (1,2 millones de dólares).
Según la embajada, ese mismo año había 60 empresas francesas implantadas en Venezuela, frente al centenar de 2008.
Tal como publicó el diario español El Mundo en marzo de 2017, Jean Anglade, director de la Cámara de Comercio, Industria y Agricultura Venezolano Francesa, precisó que en 2015 las exportaciones francesas hacia Venezuela alcanzaron los 281 millones de euros (334 millones de dólares) y en 2016 retrocedieron hasta los 213 millones de euros (253 millones de dólares). En importaciones, estas pasaron de 95 a 69 millones de euros (de 113 a 82 millones de dólares).
Julio Borges achaca la escalada de la crisis venezolana “al problema migratorio, al crimen organizado, a la desestabilización democrática y a la violencia”
La presencia francesa en Venezuela igualmente está vinculada a la construcción del Metro de Caracas, que lleva 34 años en funcionamiento, y a otras grandes empresas como: Air France, que suspendió sus vuelos a Caracas el día de la celebración de la Asamblea Constituyente de Maduro y los retomó dos días después; a entidades financieras como BNP Paribas, Société Générale y Credit Lyonnais y a multinacionales de cosméticos como L’Oréal.
Por su parte, Renault cerró en 2015 las operaciones de su filial en Venezuela, donde operaba desde 1996. En cuanto a Cementos Lafarge, el Gobierno venezolano adquirió el 89% de las acciones en 2008, en plena nacionalización de la industria cementera en Venezuela.
El Gobierno español transmite a Borges su apoyo a una solución pacífica
La ronda de encuentros de Borges le ha llevado este martes a España para reunirse con el presidente, Mariano Rajoy, y el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Alfonso Dastis. El titular de Exteriores le ha transmitido “la solidaridad del Gobierno y del pueblo español con Venezuela y nuestro firme compromiso en defensa de la democracia y el Estado de derecho”, según recoge el Ministerio en un comunicado. Asimismo, Dastis subrayó “el apoyo de España a una solución pacífica, democrática y negociada en Venezuela, que debe pasar por la plena liberación de todos los presos políticos, el respeto por la independencia e integridad de los poderes públicos y la celebración de elecciones justas y transparentes”.
Tras los encuentros, Borges afirmó: “No podemos permitir que [Venezuela] se convierta en una franquicia cubana, sin dignidad, sin derechos humanos”. Señaló que “esa es la lucha por la que ahora tenemos que dar el todo por el todo para lograr ese cambio y lo vamos a lograr”. Igualmente precisó que “hace falta mayor presión, presencia y convencimiento de que el Gobierno sepa que tiene que lograr abrirse a una transición democrática”.
Según ha podido saber ALnavío, también este martes está previsto que Borges se reúna con la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, y el expresidente español Felipe González.
A diferencia de lo planeado inicialmente, a Borges le acompaña en esta gira europea el vicepresidente de la Asamblea Nacional, Freddy Guevara, en lugar de Lilian Tintori, esposa del político venezolano en arresto domiciliario Leopoldo López. El motivo es la retirada del pasaporte a Tintori tras confiscársele 200 millones de bolívares (11.400 dólares o 9.500 euros al cambio paralelo de referencia de dolartoday.com) encontrados en su coche y por lo que fue citada a presentarse en una audiencia este martes.
Tintori confirmó que el dinero le pertenece, pero denunció un “montaje” contra ella para tratar de demostrar que hace “algo ilegal”. En su cuenta de Twitter la esposa de López explicó que esos bolívares estaban destinados a pagar “gastos familiares urgentes” de su abuela, de 100 años.
La ronda de reuniones de Borges continuará el miércoles en Berlín, donde será recibido por la canciller alemana, Ángela Merkel. Finalmente llegará el jueves a Londres, ciudad en la que sostendrá un encuentro privado con la primera ministra británica, Theresa May.