(EFE).- Las autoridades griegas abrieron este jueves una investigación contra dos curas católicos por presunta malversación de unos 3 millones de euros de las arcas de la Iglesia, dinero que aparentemente habrían intentado blanquear a través de cinco discotecas.
Las dos figuras de alto rango en la jerarquía eclesiástica helena manejaban dos cuentas bancarias de la Iglesia desde las que en los últimos ocho años salieron grandes sumas de dinero que habrían ido a parar a cuentas de los propietarios de las discotecas, informa el diario griego Kathimerini.
Las sospechas de malversación surgieron cuando los bancos privados alertaron a la Autoridad contra el Blanqueo de Capitales de Grecia sobre el movimiento de grandes sumas de dinero en dichas cuentas, que ya han sido congeladas, como también los bienes de los involucrados.
Las autoridades competentes han informado del caso al Vaticano, asegura el periódico Efsyn.
El último envío de dinero, de 50.000 euros, a los cincos empresarios se realizó tan solo hace unos días.
El Santo Sínodo de la Iglesia Católica de Grecia aseguró hoy, en un comunicado, que «que no tiene información sobre las denuncias» y que espera ser informado por las autoridades competentes para tomar «una postura oficial al respecto».
El fiscal encargado de investigar el caso indagará si se ha cometido el delito de malversación de fondos por parte de los dos sacerdotes y el del blanqueo de capitales por parte de los cinco empresarios.
El dogma cristiano predominante en Grecia es el ortodoxo, si bien hay entre 50.000 y 70.000 ciudadanos de fe católica (entre el 0,5 y el 0,7 % de la población), principalmente residentes de las islas de las Cícladas y del mar Jónico que estuvieron durante siglos bajo el dominio veneciano o francés.
A estos se suman unos 150.000 inmigrantes de países como Polonia, Filipinas o Ucrania, que residen permanentemente en el país.