Daniel Gómez (ALN).- India sostiene que la crisis del petróleo fue creada artificialmente por los productores, los cuales restringen el suministro y mantienen altos los precios. Como alternativa, y aprovechando el cambio de gobierno en Estados Unidos, planean retomar las importaciones con Venezuela e Irán. Lo aseguran funcionarios del gobierno de Narendra Modi.
India planea reanudar la importación de energía de Venezuela e Irán para contrarrestar los altos precios del crudo de algunos productores, dijeron dos funcionarios del gobierno de Narendra Modi al medio indio Hindustan Times.
En junio de 2020, India, que fue el tercer máximo comprador de crudo venezolano, suspendió las relaciones con la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) por las sanciones de Estados Unidos. Cabe recordar que esta medida fue liderada por el propio Donald Trump. Cuando el expresidente visitó Nueva Delhi en febrero del año pasado, conversó el tema con el primer ministro, Narendra Modi, y anunció “sanciones severas” si las empresas indias continuaban las relaciones con PDVSA.
Un año después muchas cosas han cambiado. Empezando por la pandemia, y terminando porque en la Casa Blanca no está Trump sino el demócrata Joe Biden. Ambas cosas afectan a India y su negocio petrolero y explican la iniciativa del gobierno de Mori.
El porqué de la presión de India
Por un lado, el coronavirus provocó una crisis petrolera sin precedentes. Hogares, empresas e incluso países tuvieron que parar por las medidas de confinamiento. Esto hizo que los niveles de consumo de energía se desplomaran, provocando un exceso de oferta y el consecuente desplome de los precios del barril. Como solución, la medida que pactó la Organización de Países Productores y Exportadores de Petróleo (OPEP) fue la de paralizar el suministro para así mantener los precios altos. Sin embargo, esta tiene un impacto negativo en una economía como la de India, que necesita importar petróleo para que sus potentes refinerías, entre ellas las de Realiance, estén operativas. India importa más del 80% del crudo que procesa. También es importante el hecho de que India es el tercer mayor consumidor de crudo del mundo por detrás de China y EEUU.
El otro punto clave de la historia son los cambios en Washington. Trump aplicó una estrategia de máxima presión a Venezuela, y también a Irán. Una de las medidas impuestas fue prohibir los negocios con estos países a empresas con negocios en suelo estadounidense (la mayoría de las multinacionales los tienen). El caso es que Venezuela e Irán vendían a India petróleo barato, pese a ser países OPEP. Y lo vendían porque por las sanciones tuvieron que paralizar estos negocios. Sanciones que, no obstante, están reconsiderándose en la administración Biden.
India dispuesta a importar crudo venezolano
Así que mientras el nuevo gobierno de EEUU se decide, India presiona.
“Las restricciones a las importaciones se impusieron bajo la presión del gobierno de Trump. Ahora, o Estados Unidos ayuda a mitigar nuestra crisis energética o actuaremos en interés de nuestra nación”, dijo uno de los funcionarios.
El otro funcionario insistió en realizar esfuerzos diplomáticos para que la OPEP alivie la situación de suministro.
“India puede plantear este asunto en varios foros como Quad, una plataforma plurilateral que involucra a Estados Unidos, Japón, India y Australia. Con el alivio de la tensión en la frontera, Nueva Delhi también puede involucrar a Beijing para tener una voz común de los cuatro o cinco principales consumidores de petróleo del mundo. Corea del Sur también podría ser un aliado en este asunto de interés común”, dijo este último funcionario.